Tras cuatro décadas de entrega y dedicación, María Elvira Fernández Soldo, conocida y apreciada por todos los vecinos de la comarca trivesa, ha cerrado un importante capítulo en su vida laboral al jubilarse esta semana como directora de la oficina de Correos en A Pobra de Trives.
Con quince años al frente de esta oficina de Correos en el oriente ourensano, Elvira ha sido testigo de innumerables cambios en el mundo de la correspondencia. Desde sus comienzos como funcionaria de Correos hace 40 años, recuerda cuando los carteros transportaban sus pesadas bolsas de cuero que pasaban de los 20 kilos, hasta el presente, donde la digitalización ha transformado el modo de comunicarnos. “Yo me acuerdo de dejar la bolsa en algún comercio durante el reparto por no poder con ella”.
Según ella misma explica, el uso de las cartas ha evolucionado notablemente, pasando de ser un medio principalmente utilizado para enviar cartas de amor o recuerdos familiares, a convertirse en un vehículo para cientos de envíos diarios de bancos, impuestos y multas de tráfico.
Su trayectoria
Elvira comenzó su carrera en Correos en 1984, en Madrid, para luego trasladarse a Galicia, en donde Trives ya fue su primer destino. Sus inicios fueron de cartera en la villa, donde recuerda que llevar giros a varias casas con dinero contante y sonante era habitual.
Desde el año 2009, ha ocupado el puesto de directora de la oficina de A Pobra de Trives, demostrando una dedicación inquebrantable hacia su trabajo y su comunidad.
Los vecinos de Trives se despiden con gratitud de Elvira Fernández, una figura en la vida cotidiana durante décadas y ella se lleva cientos de anécdotas.
