Siete alcaldes valdeorreses rubricaron los convenios que permitirán mejorar las pistas de sus concellos con una inversión de 387.763 euros. A la cita de ayer, que se desarrolló en la Casa Grande de Viloira, sólo faltaron los regidores de Larouco y Rubiá, que enviaron sendos representantes.
La reunión fue convocada por la Consellería do Medio Rural e do Mar y la presidió el secretario xeral de Medio Rural e Montes, Tomás Fernández-Couto, que explicó que los proyectos buscan mejorar la calidad de vida de la población que vive en el rural valdeorrés.
La cuantía de las partidas varía desde los 55.965 euros de Carballeda hasta los 28.618 de Larouco. Los demás concellos desarrollarán proyectos por los siguientes importes: O Barco (51.190 euros), O Bolo (42.982), Petín (36.054), A Rúa (30.922), Rubiá (46.418), A Veiga (51.830) y Vilamartín (43.780). Las obras comenzarán en breve y deberían estar finalizadas antes del próximo otoño.
Los convenios firmados permitirán desarrollar el plan denominado 'Proxectos Estratéxicos de Infraestruturas no Medio Rural' (PEIM), que financian la Administración xeral del Estado y la Xunta. La inversión total de los proyectos englobados en este programa es de 38,5 millones de euros, según dijo Tomás Fernández-Couto. El año pasado se ejecutó una primera parte, cifrada en 9,5 millones, quedando pendientes los 19 millones restantes.
La cuantía de las partidas varía desde los 55.965 euros de Carballeda hasta los 28.618 de Larouco. Los demás concellos desarrollarán proyectos por los siguientes importes: O Barco (51.190 euros), O Bolo (42.982), Petín (36.054), A Rúa (30.922), Rubiá (46.418), A Veiga (51.830) y Vilamartín (43.780). Las obras comenzarán en breve y deberían estar finalizadas antes del próximo otoño.
Los convenios firmados permitirán desarrollar el plan denominado 'Proxectos Estratéxicos de Infraestruturas no Medio Rural' (PEIM), que financian la Administración xeral del Estado y la Xunta. La inversión total de los proyectos englobados en este programa es de 38,5 millones de euros, según dijo Tomás Fernández-Couto. El año pasado se ejecutó una primera parte, cifrada en 9,5 millones, quedando pendientes los 19 millones restantes.
