Cáritas Interparroquial de O Barco lanzó una petición de ayuda urgente. La reducción de las ayudas y el aumento de las necesidades acaba con sus reservas. Los productos básicos que puede ofrecer (como el arroz o los alimentos infantiles) escasean de forma más que preocupante. A modo de ejemplo, baste señalar que tan sólo dispone de un paquete de kilo de azúcar o dos cajas de botellas de aceite. La ayuda del ponferradino Banco de Alimentos del Sil apenas mantiene unas existencias que dejaron de alimentar las campañas solidarias o las entregas de las administraciones. Cabe reseñar que la última entrega de alimentos de la Unión Europea sólo llegó a 1.900 kilos, cuando en la anterior fueron 6.000.
El fuerte incremento de los precios redujo al mínimo las ahora muy necesarias donaciones. En no pocas ocasiones, este encarecimiento se suma a unos empleos precarios para repercutir en un fuerte aumento de los casos de emergencia atendidos. Son cada vez más las familias que acuden a la ONG diocesana en busca de ayuda para pagar unos alquileres que raramente bajan de los 300 euros mensuales o unas facturas de la luz que se aproximan a los 100 euros.
Esta difícil situación fue trasladada por la trabajadora social de Cáritas O Barco, Isabel Álvarez, a la diócesis de Astorga, a la que planteó la necesidad de organizar un programa de recogida de alimentos con carácter urgente ante el fuerte incremento de las familias que acuden a la sede parroquial como última tabla de salvación.
La comparación de los periodos comprendidos entre el 1 de enero y el 8 de junio de 2022 y 2023 es descorazonador. El número de beneficiarios de las ayudas de Cáritas barquense pasó de 333 a 409 (creció un 22,82 %), en tanto que las ayudas solicitadas aumentaron de 420 a 628 (49,52 %) y el total de servicios prestados se elevó de 1.363 a 2.490 (82,68 %). A su vez, los casos de emergencia atendidos aumentaron un 60 % (15 y 24) y elevaron un 40 % la partida destinada a afontarlos (de 1.700 euros pasó a 2.380).
A lo largo de 2022, esta oficina registró 70 altas de familias, que se traducen en 189 personas, un dato que con toda seguridad se quedará pequeño este año.
