La pieza mide 2,63 metros de alto y pesa 380 kilogramos
El pastelero carballiñés José Manuel de la Iglesia lleva desde el mes de marzo trabajando en la obra que está expuesta en el escaparate de la pastelería Royal. La pieza es una réplica en azúcar de la Catedral de Santiago y mide 2,63 metros de alto y pesa 380 kilogramos.