En el Museo del Ejército se conserva un estandarte del año 1550 en forma de corneta con la efigie de la Virgen, con su vestido blanco y manto azul, que es como se representa la Inmaculada desde las primeras imágenes. No era por tanto desconocida el 7 de diciembre de 1585 para los integrantes del Tercio de Flandes que mandaba Francisco Arias de Bobadilla, que se encontraban bloqueados entre los ríos Mosa y Waal por la flota enemiga, casi sin alimentos y con la ropa húmeda. El almirante Filips van Hohenlohe-Neuenstein les propuso la rendición, a lo que los españoles contestaron: "Los infantes españoles prefieren la muerte a la deshonra. Ya hablaremos de capitulación después de muertos".
Esto ocasionó que el almirante abriese las compuertas de los diques de los ríos para inundar el campamento, no quedando más tierra que la colina de Empel, donde los españoles empezaron a cavar las trincheras para resistir. Un soldado encontró un retablo con la imagen de la Inmaculada Concepción, lo que dada la devoción existente fue considerado como: "Este tesoro tan rico que descubrieron debajo de la tierra fue un divino nuncio del bien, que por intercesión de la Virgen María esperaban en su bendito día".
Durante la noche, los ríos se helaron a causa de un inesperado viento muy frío, lo que aprovecharon las tropas del tercio español para atacar al enemigo y vencerlo, sin que ellos tuvieran ninguna baja. Ese mismo día, el 8 de diciembre de 1585, la Virgen es proclamada patrona de los Tercios de Flandes y también de Italia.
Hubo que esperar años y peticiones de los españoles, para que se promulgase en la bula "Ineffabilis Deus" del 8 de diciembre de 1854 dogma de fe católica la Concepción Inmaculada de la Virgen Santísima. 48 años más tarde, el 12 de noviembre de 1892, a solicitud del inspector del arma de Infantería del Ejército de Tierra, por real orden de la reina regente María Cristina, se declara “Patrona del Arma de Infantería a Nuestra Señora la Purísima e Inmaculada Concepción". En la Infantería española se la conoció siempre con el nombre de “Purísima”, y todos los infantes entienden que es la Inmaculada Concepción, celebrándose en todos los regimientos el 8 de diciembre de cada año la "Patrona", nombre con el que también es conocida.
