Opinión

¿LA FAMILIA? BIEN, GRACIAS

En 2014 se celebrará el Año Internacional de la Familia y, anticipándose a esta circunstancia, Renata Kaczmarska, coordinadora del Programa de Familia de Naciones Unidas, visitó Madrid a comienzos de esta semana para debatir y analizar la situación actual de esta institución, sus retos de futuro y sus necesidades más urgentes.


Entre sus propuestas, llama la atención la de que la familia cuente con un mayor amparo institucional a nivel nacional, para lo que la representante de la ONU propuso la creación de órganos que se encarguen de velar muy especialmente por sus necesidades. Se refería Renata Kaczmarska a ministerios o agencias que se ocupen de implantar políticas con las que proteger y ayudar a las familias, particularmente en estos tiempos difíciles.


A propósito de la dificultad de los años que vivimos, Ignacio Socías, responsable del Instituto de Estudios de la Familia ? Family Watch, hablaba en ese mismo foro sobre el papel de las familias a la hora de afrontar la crisis actual. Y es que, aunque la familia es algo más que una red para salvar a los trapecistas que pierden pie y se precipitan al vacío, ese no deja de ser uno más de sus cometidos en una época en que la pobreza y el desempleo van en aumento.


La familia también está ahí para protegernos frente a los contratiempos de la vida -aunque no sólo para eso-. Y precisamente por ese motivo es de justicia brindarle el apoyo que reclamaba en Madrid la representante de Naciones Unidas, secundada por no pocos expertos. Un apoyo como el que, muy cerca de nosotros y en la medida de sus posibilidades, brindan a las familias ourensanas diversas asociaciones y entidades.


Entre ellas querría destacar hoy a la Fundación de Amigos de la Barrera, una institución nacida para que la conciliación entre la vida laboral y familiar sea posible, para que padres y madres puedan integrar más fácilmente ambas realidades y para que, al mismo tiempo, sus hijos reciban una atención esmerada y una formación en valores. Una entidad que cumple con lo que proponían esta semana los expertos que pasaron por Madrid: dar más oportunidades a la institución familiar y cuidarla con el mismo afán con el que ella nos cuida, haciendo, en definitiva, todo lo posible para que podamos seguir diciendo aquello de '¿La familia? Bien, gracias'.

Te puede interesar