Una tubería de un bloque de edificios de la calle Rosalía de Castro de Xinzo sufrió una rotura y vierte aguas residuales a la vía pública. Los vecinos (21 afectados) y los propietarios de seis negocios sufren malos olores y están indignados porque dicen que la canalización de los inmuebles no desagüa debido a que el alcantarillado de la calle no recoge las aguas.
La calle Rosalía de Castro de Xinzo registra un vertido de aguas residuales procedente de un bloque de edificios desde el pasado jueves. Un total de 21 vecinos y seis propietarios de negocios sufren malos olores y están indignados porque atribuyen el problema al alcantarillado público. Las tuberías de los edificios no desagüan porque la red del alcantarillado fue construido en un nivel más elevado y, por tanto, no recoge las aguas, que vuelven hacia los edificios. Esto es lo que provocó la roturas, explican los afectados.
Argumentan que los bomberos acudieron tres veces hasta la zona para intentar arreglarlo pero como no hay arqueta no se pudo evacuar las aguas residuales y señalan que están dispuestos a pagar de su bolsillo el arreglo de la rotura de la tubería. Sin embargo, consideran que es el Concello el que debe asumir una obra mayor para que el edificio pueda desagüar en la red de saneamiento público.
El portavoz del BNG, Amador Díaz Penín, apoya a los vecinos y señala que o Concello debe darlles unha solución y es que la institución local considera que deben arreglarlo los vecinos.
Argumentan que los bomberos acudieron tres veces hasta la zona para intentar arreglarlo pero como no hay arqueta no se pudo evacuar las aguas residuales y señalan que están dispuestos a pagar de su bolsillo el arreglo de la rotura de la tubería. Sin embargo, consideran que es el Concello el que debe asumir una obra mayor para que el edificio pueda desagüar en la red de saneamiento público.
El portavoz del BNG, Amador Díaz Penín, apoya a los vecinos y señala que o Concello debe darlles unha solución y es que la institución local considera que deben arreglarlo los vecinos.
