CAMARERO DEL SIGLO XXI

Suena el despertador. Son las 4 o 5 de la madrugada. Te levantas y pones los pies en el suelo. Sabes que dentro de unas horas toca estar en tu puesto de trabajo. Para ti ya comenzó el día. Sales por el umbral de la puerta, no volverás hasta media tarde. Te vas entre despierto y adormilado. Haces recuento de si llevas todo, antes de encender el coche. Piensas: ¿qué me deparará el día?
Hoy hablo del mundo de la hostelería o trabajos que tienen horarios sacrificados. Pero como es tu trabajo, lo haces feliz, sintiéndote útil cada mañana de esos 365 días. Sirves desayunos, te encuentras cada día con personas que te hacen sonreír cuando os cruzáis, y tú sigues sirviendo cafés. Otras veces aguantas comentarios que no quieres escuchar. Cuántas veces querrías estar en el sofá, y más los días de lluvia, o cuando estás más dormido que despierto, con dolor de piernas o pies. Preferirías que otro hiciese tu turno.

Te propongo: Retráete a un segundo plano. Eres un simple espectador. Ves camareros/as acelerados por la mañana entre el movimiento de la cafetería. Mientras tú intentas despertar o ver el periódico. Ellos están en su mundo, tantos cafés, cortados, tostadas, zumito de...Una locura, retener tanto a ciertas horas o que te exijan de mala manera un café. Lo cómico viene cuando tienes un conocido, amigo/a, pareja o trabajas en la hostelería.

Intenta quedar con ellos. ¡Que no te extrañe nada lo que pueda suceder! No te imaginas, desde los percances más desproporcionados a los más surrealistas.… Puede estar destrozado por el día de ajetreo. Suena tu móvil. Te dice: 'No puedo quedar, doblo turno',…o mejor cuando te comenta: 'Me he quemado la mano con el horno'. Nunca te imaginas lo emocionante e interesante que es su vida, y la cuestión que cambiará su vida hoy.

… Como colofón, ¿qué pensarías? ¿Te quedas con la palabra del joven camarero del siglo XXI de que otro día podrá ser?...

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