Para nada quiero criticar de modo generalizado la extraordinaria labor de las Fuerzas de Seguridad del Estado, y mucho menos de la Guardia Civil de Tráfico a quienes admiro y respeto; pero ese respeto ha de ser mutuo y reconozcan que muchas veces en la carretera no es así. El complejo de superioridad de algunos agentes se manifiesta tan pronto hay necesidad de dialogar con ellos; se erigen en únicos poseedores de la razón, sin dar al conductor margen para exponer su razonamiento o punto de vista, su explicación.
Seguramente, y de eso no me cabe duda, que una vez terminado el servicio y colgado el uniforme hasta el día siguiente, son personas extraordinarias con los mejores calificativos; pero su actitud en la carretera, aun valorando, eso sí, su labor en incidentes, controles o accidentes, cuando se impone sancionar lo que a 'sus juicios' es una infracción vial, no atienden ni la mas mínima explicación, sin pensar para nada que también el conductor puede tener razones tan válidas como las de ellos mismos. Pero claro, es la palabra del conductor contra la del agente y precisamente el testigo es ¡también el otro agente!
Desde la Unión de Guardia Civiles de Ourense y Federación de Tráfico expresan que denunciarían cualquier hecho ilícito del que tengan conocimiento (faltaría mas), incluido un abuso de autoridad; pero me pregunto ¿a quién pongo de testigo si no se admite para ello al compañero de viaje, o si se viaja solo en el coche y se considera verídico un exceso ilícito por parte del agente?
Entiendo y apruebo lo manifestado por Lalo Pavón en La Región del día 21 de mayo en el articulo 'El poder del uniforme', manifiesta una serie de incidentes muy significativos a tener en cuenta. Pero me llena de asombro lo expuesto por el señor Bouzada Blanco, secretario general de la Unión de Guardia Civiles de Ourense el día 30 de mayo, en su carta dice: '... como en cualquier otra profesión, en la nuestra siempre ha existido de todo?¡vaya si el secretario general dice eso?!'. Pero es que más adelante comenta: '... respetamos la presunción de inocencia del conductor?', y digo yo ¿y cómo? Y le pone la guinda al texto contestándole al señor Pavón: '... por lo tanto tome los casos que comenta como un 50% de los hechos que le hayan podido contar', es decir, que por lo menos admite que en la mitad de los relatados, los agentes de Tráfico han cometido un abuso de autoridad en su labor de caza-multas en nuestras carreteras.
Estoy convencido de que mi opinión es generalizada; también he leído otras cartas similares en este mismo periódico (señor García, 5/6/11). Entonces ¿es demagógico que tantos pensemos lo mismo sobre la Guardia Civil de Tráfico? Presuponemos que a pesar de todo, también hay muchos agentes los que no abusan de 'El poder del uniforme'.
Desde la Unión de Guardia Civiles de Ourense y Federación de Tráfico expresan que denunciarían cualquier hecho ilícito del que tengan conocimiento (faltaría mas), incluido un abuso de autoridad; pero me pregunto ¿a quién pongo de testigo si no se admite para ello al compañero de viaje, o si se viaja solo en el coche y se considera verídico un exceso ilícito por parte del agente?
Entiendo y apruebo lo manifestado por Lalo Pavón en La Región del día 21 de mayo en el articulo 'El poder del uniforme', manifiesta una serie de incidentes muy significativos a tener en cuenta. Pero me llena de asombro lo expuesto por el señor Bouzada Blanco, secretario general de la Unión de Guardia Civiles de Ourense el día 30 de mayo, en su carta dice: '... como en cualquier otra profesión, en la nuestra siempre ha existido de todo?¡vaya si el secretario general dice eso?!'. Pero es que más adelante comenta: '... respetamos la presunción de inocencia del conductor?', y digo yo ¿y cómo? Y le pone la guinda al texto contestándole al señor Pavón: '... por lo tanto tome los casos que comenta como un 50% de los hechos que le hayan podido contar', es decir, que por lo menos admite que en la mitad de los relatados, los agentes de Tráfico han cometido un abuso de autoridad en su labor de caza-multas en nuestras carreteras.
Estoy convencido de que mi opinión es generalizada; también he leído otras cartas similares en este mismo periódico (señor García, 5/6/11). Entonces ¿es demagógico que tantos pensemos lo mismo sobre la Guardia Civil de Tráfico? Presuponemos que a pesar de todo, también hay muchos agentes los que no abusan de 'El poder del uniforme'.
