Capital de Terra de Celanova, la villa y sus habitantes siguen el mandato que, en su testamento datado en 977, dejó escrito San Rosendo de recibir en su “casa maravillosamente construida (…) por siempre jamás a siervos y libres, a nobles y plebeyos de cualquier lugar que provengan...”.
A la oferta de turismo rural que se extiende por el extrarradio celanovés, la villa de San Rosendo añade dos hoteles y unos apartamentos turísticos que cuidan con detalle y mimo al visitante celanovés. Se trata de Celanova House, dos viviendas de tipo turístico habilitadas sobre un edificio del siglo XVIII; el Hotel Celanova, en el corazón de la villa de San Rosendo ofrece todas las comodidades y servicios que el cliente precisa, incluido un restaurante imprescindible para cualquier evento o velada, Alquimia.
Y también Acouga Hotel Boutique, donde cada habitación lleva la literatura local por nombre y bandera.
La hostelería local ofrece un variado menú para todos los gustos y estilos, con varios locales “enxebres” en los que disfrutar de pinchos y tapas de toda la vida en una ruta entre las calles San Roque y Pardo Bazán, maridados con propuestas más elaboradas que se distribuyen por el casco urbano. Administración Gastro Bar es una opción gastronómica más en el centro de Celanova, donde disfrutar de su marca de hamburguesa registrada “Burguesiña”, pero también de quesos y panes artesanales y locales, cafés 100% arábica y vinos de las cinco denominaciones de origen gallegas. Una oferta que, tal y como explicaba su promotor, José Antonio González, en 2024 dará una paso más con una nueva línea con “menos plancha, máis frescor e identidade”, duplicando la referencia de caldos gallegos e introduciendo productos de la Indicación Xeográfica Protexida (IXP) de Galicia.
En la carta de los restaurantes locales priman los productos de la tierra, con guiños al mar, en una oda a la cocina gallega, pero también internacional. La llegada de nuevos vecinos ha dado un giro a la oferta local con establecimientos que apuestan por platos venezolanos y mexicanos. Es el caso de “El Compadre”, el restaurante que este verano pusieron en marcha Pepe Esteban y Maricarmen de Prado, dos mexicanos con raíces en Málaga y Celanova respectivamente, donde descubrir y disfrutar de todos los sabores y platos típicos de México. Está en la calle Encarnación.
