Promover una gastronomía micológica los 365 días del año es el objetivo de 'Pan do Demo', una empresa celanovesa dedicada al cultivo y comercialización de 'pleurotus ostreatus', una seta popularmente conocida como ostra por su parecido con este molusco. Seis meses después de montar los invernaderos en Pontefechas, Pan do Demo saca al mercado la primera cosecha 'made in Celanova'.
'Los primeros kilos, en pleno Entroido, fueron para los restaurantes de Verín. Chinos, ingleses y latinos también son unos consumidores importantes, sobre todo en racimo, porque el periodo de conservación es mayor', comenta Borja Mínguez, responsable de la planta que en tres meses comercializará alrededor de 3.000 kilos de pleurotus en fruterías, panaderías y establecimientos de restauración de toda la provincia, así como la vecina Pontevedra. 'Apostamos por el comercio local, porque la calidad y la frescura es nuestro sello', matiza Mínguez, al tiempo que reconoce que 'aunque en Galicia no hay demasiada cultura de setas y las empresas productoras son escasas, el mercado gastronómico está en expansión'.
Tres atípicos invernaderos de color verde acogen la producción del 'pleurotus'. En su interior, a una temperatura media de 17 grados, el micelio ha invadido ya las alpacas creando singulares racimos. 'El proceso ha sido largo, sobre todo por la climatología local que no es favorable, con inviernos muy fríos y veranos calurosos', confiesa Borja Mínguez mientras ultima los nuevos cultivos que acogerán, a partir del mes de abril, la producción de champiñón.
Dada la afición comarcal, la empresa organiza visitas guiadas a particulares, grupos y colegios. Además de la venta directa, un bar de tapas en Celanova ofrece la posibilidad de degustar setas a la brasa, en puchero o en empanada.
Tres atípicos invernaderos de color verde acogen la producción del 'pleurotus'. En su interior, a una temperatura media de 17 grados, el micelio ha invadido ya las alpacas creando singulares racimos. 'El proceso ha sido largo, sobre todo por la climatología local que no es favorable, con inviernos muy fríos y veranos calurosos', confiesa Borja Mínguez mientras ultima los nuevos cultivos que acogerán, a partir del mes de abril, la producción de champiñón.
Dada la afición comarcal, la empresa organiza visitas guiadas a particulares, grupos y colegios. Además de la venta directa, un bar de tapas en Celanova ofrece la posibilidad de degustar setas a la brasa, en puchero o en empanada.
