La reputada Feria de Arte Contemporáneo ARCO es, para cuatro galerías de Galicia, una "parada" obligatoria por la presencia de comisarios y directores de museos y los responsables de Trinta, Bacelos, Adhoc y PM8 manifiestan el interés por este espacio en el que están representados 23 países.
La recriminación por "la chapuza" del IVA del arte es una constante.
Para Francisco Salas, el artífice de la viguesa PM8, es su debut, puesto que su proyecto es "joven" y para acudir a este foro es necesario que transcurran dos años de programa expositivo, "porque antes de ese tiempo uno no puede venir".
Asunta Rodríguez, propietaria de la compostelana Galería Trinta, es la más veterana al acumular veinticinco ediciones. Está encantada con su trabajo, pese a "los más de cinco años de verdadera travesía por el desierto y resistencia" motivados por esta crisis económica.
"Llegados a este punto, eres un poco más fuerte. Piensas, si lo he hecho en años anteriores, muy difícil se tiene que poner la cosa para que no se haga en los que vienen por delante", expone, con un optimismo envidiable.
Las vacas flacas, prosigue, "en el arte no influyen", pero sí lo hacen "en el mercado del arte".
"Y como lo que nosotros vendemos es un producto inútil, en el sentido de que no tiene utilidad, no sirve para nada y no hace falta, pues este es de los sectores que primero se contraen", manifiesta.
"Otra cosa es la importancia social y cultural del arte. De eso no estoy hablando puesto que ni lo discuto", continúa, y hace este matiz para evitar equívocos.
Está satisfecha con que Galicia esté presente con cuatro galerías y por el hecho de que "se mantenga los proyectos".
"Trinta hará treinta años el año que viene y soy consciente de que fuera de los centros de poder es más complicado acceder a la visibilidad y a los coleccionistas. Pero yo estoy encantada", dice.
La alegría se le transforma en indignación cuando se le menciona la rebaja del IVA del arte al 10% anunciada por el Gobierno y que solo durante veinticuatro horas escasas fue recibida como un "maná".
"Voy a ser políticamente incorrecta -avisa Asunta Rodríguez-. Ha sido una mentira bien contada. Una chapuza. El IVA del 10% es para los artistas que a la hora de hacer sus facturas a la galería que compra sus obras pueden hacerlas al 10%. Esto cuando, así lo digo, no deberían pagar impuestos porque generan un patrimonio de valor simbólico para el mundo".
"Las galerías -continúa- seguimos vendiendo arte al tipo más elevado, al 21%. Y lo que no se puede hacer es despreciar un tejido empresarial importantísimo que mueve mucho dinero y alimenta a muchas familias diciéndole al público que lo que realmente hay que proteger es a los artistas pero no a las galerías. Muy mal, fatal".
Inés Román, responsable de la galería Adhoc de Vigo, lleva en Arco desde 1993, por lo que se considera "una veterana". Al igual que Asunta Rodríguez, ha notado los efectos de la debacle económica porque "muchos coleccionistas de clase media desaparecieron, no es que compren menos, sino que directamente no compran. La clase media es donde más se está notando".
Bajo su criterio, todo se está "focalizando" en Madrid y fuera "está la cosa más complicada". Muchas galerías de Barcelona se están trasladando a Madrid, algo que la deja atónita, y en la capital el arte se concentra en una calle, -Doctor Fourquet-, donde existe una colaboración mutua "para facilitar" este trabajo.
Al tratar el asunto del IVA, se ve su molestia: "Todo está para nosotros igual que antes de que abriesen la boca. Se nos acabó la alegría en un tiempo récord. Quienes nos gobiernan no entienden muy bien cómo trabajamos y tampoco qué hacemos. Esto ha quedado claro".
Pepa Gómez Montesinos, directora de otra galería viguesa, Bacelos, suma 13 ediciones, y como sus compañeras, admite que la crisis ha afectado a este colectivo, "porque a nosotros nos ha influido igual que lo ha hecho en todo. Nos afecta muchísimo".
En su galería gallega casi "no hay movimiento en los últimos años" y como "en Madrid hay interés" no ha dudado en crear negocio allí. "En Madrid nos ayudamos unas a otras. Y Galicia está muerta últimamente".
¿Y el IVA del arte? "No nos bajaron el IVA. Se lo bajaron al artista. ¿Rebaja un poco la obra? En el valor final muy poco", concluye.
