Stallone cierra la saga con 'John Rambo', una película 'realista y brutal' contra la 'poca emoción' del cine

Sylvester Stallone.
Sylvester Stallone cierra su particular saga militar con 'John Rambo', la cuarta entrega de la serie, una película 'realista y brutal' contra la 'poca emoción' del cine actual, según dijo hoy el actor. Con este largometraje, que se estrena en España el próximo viernes, Stallone busca distanciarse de las anteriores entregas, 'demasiado de Hollywood, de mucho músculo y alejadas de la realidad'.
Por primera vez, el actor, de 61 años, es además director de un 'Rambo'.'Sé que pueden criticar la película por demasiado violenta, pero no me importa porque he mostrado la verdad', afirmó.

La guerra es 'lo más violento que hay en el mundo'. Para mostrar su 'brutalidad', Stallone señaló que ha renunciado a ganar más dinero: 'Muchas películas no han sido honestas, yo quería que la gente viera la realidad de una guerra civil'. En esta ocasión, el ex-militar John Rambo, dedicado a la caza de serpientes en Birmania, interviene para salvar a unos misioneros que son capturados en la jungla. El personaje está 'más perdido que nunca' y, al involucrarse en el salvamento, vive 'un infierno en la tierra'.

En un acto celebrado en el estadio Santiago Bernabeu, el norteamericano explicó su visión teológica del film, según la cual Rambo representa el purgatorio y los misioneros son ángeles. 'El mundo es violento', lo que explica que 'cuando acaba una guerra comienza otra'. 'Las personas mayores deciden empezar los conflictos pero son los jóvenes los que van a luchar. ¿Puede Dios arreglar todo esto? Sinceramente, no lo sé', dijo.

NADA DE POLÍTICA

Stallone espera que 'John Rambo' sea un descubrimiento para 'toda una generación' que no conoce al personaje, como 'ver un animal nuevo capturado en la selva al que todos quieren ir a ver'. Para documentar el largometraje, habló con militares que volvían de conflictos y así poder 'entender su enfado'. Stallone también leyó libros sobre el conflicto birmano que 'tiraba contra la pared' tras descubrir que 'en Birmania se queman niños vivos', dentro de un conflicto que dura ya más de 60 años.

En época preelectoral en su país, Stallone afirmó no sentirse 'nada cómodo' con apropiaciones de su 'neutral' personaje por parte de algunos políticos. 'Ronald Reagan dijo en 1988 que Rambo era un luchador republicano y desde entonces se le ve como una máquina de guerra de su causa, cuando no es nada de eso', explicó. El candidato favorito del actor para presidir el país es el senador del partido republicano John McCain, un 'tío con grandes huevos'.

En cualquier caso, Stallone no piensa seguir una carrera política como su 'gran amigo' Arnold Schwarzenegger, todo un 'animal político'. Ve próxima su retirada como intérprete, momento en el que pasará definitivamente al otro lado de la cámara como director. Pero hasta que eso llegue, piensa ser 'realista y fiel' con su 'imagen', inevitablemente ligada a 'personajes físicos'. 'Ya entraré en otros temas cuando dirija', concluyó.

Te puede interesar