El Arenteiro no encuentra rival y supera al Palencia Cristo con gol de Pibe (1-0)

Álex, Germán, Vitra y Escobar observan como la pelota de Pibe se cuela en la meta visitante. MARTIÑO PINAL
photo_camera Álex, Germán, Vitra y Escobar observan como la pelota de Pibe se cuela en la meta visitante. MARTIÑO PINAL
El conjunto de Espiñedo sigue sumando victorias semana tras semana y esta vez le tocó padecerlo al Palencia Cristo, al que superó con un gol de Pibe

Otra semana con la misma canción para el Arenteiro. Y no será porque los rivales no se la sepan, pero da igual. Los verdes son un martillo pilón. Ayer le tocó sufrirlo al Palencia, que plantó cara en la primera parte, pero que acabó diluyéndose y llevándose una derrota por 1-0 que les puede consolar, porque es el resultado más habitual de los verdes, que además son benevolentes con sus rivales y no golean a nadie.

Sorprendió el equipo palentino al inicio. Se sabía que era un buen equipo y lo demostró. Salió atrevido y más ofensivo de lo que se puede esperar cuando uno visita el campo de un líder intratable. Además, cuenta con peloteros de buen toque lo que le ayudó a tener el control del juego y también de la pelota. Lo de crear ocasiones ya es harina de otro costal. La primera parte fue flojita.

Un par de faltas y disparos sin mayor peligro. Javi Rey les pedía tranquilidad a los suyos y otra cosa no tendrán, pero de eso y de experiencia, van sobrados. Dejaban correr el partido y ya pondrían el ritmo cuando les pareciera bien. Empezaron a calentar en los últimos cinco minutos con un remate de Adrián Cruz y una falta lateral de Pibe.

Llegó la segunda parte y los locales cogieron el toro por los cuernos. Se hicieron con el partido y fueron, poco a poco, inclinando el campo a su favor. El Palencia ya no tenía la frescura de la primera mitad y fue reculando, dando por bueno el empate y buscando alguna contra para sorprender. Dos centros de Pibe llevaron él ‘¡uy!’ a la grada.

El primero lo sacó un defensa cuando Marquitos iba a empujarla y el segundo lo mandó a córner Mingotes. En medio una contra de los castellanos, Adri Castro dejó para Sergio Montes que sacó un disparo con la izquierda. Una mano magistral de Diego García evitó el tanto. Fue un espejismo. 

En el 77 último aviso verde. Error garrafal del meta visitante Guillermo que aprovecha Pibe pero, tras recortar y disparar, la pelota pegó en un defensa y se fue al poste. Y en el 82, el 1-0. Falta lateral de Pibe, se va cerrando y entra por el segundo palo ante la desesperación visitante.

Quedaban diez minutos, pero todo estaba visto para sentencia como tantas otras veces. El Arenteiro apagó la luz y le dijo al último que cerrara la puerta. Suma 50 puntos y sigue sin inmutarse. Ellos son así.

Te puede interesar