El Real Madrid quiere sentir que la distancia con el Barcelona se acorta, 48 horas después de haber conseguido el pase a la Final a cuatro, y de alguna manera su regreso a la élite europea después de 15 años de anonimato.
Los últimos clásicos tienen color azulgrana, al menos en competición nacional, ya que los diez últimos siempre se decantaron del lado barcelonés y algunos con marcadores de sonrojo. Esta temporada ya van tres, en la semifinal de la Supercopa (89-55), en Liga en el Palau (95-75) y en la final de la Copa del Rey en el Palacio de los Deportes madrileño (60-68).
La última victoria madrileña en Liga fue el 26 de abril de 2008, cuando se impuso por 90-73 en el Palacio de Vistalegre, aunque en realidad el último triunfo es un poco más reciente, en los cuartos de final de la Euroliga de la pasada temporada, en el segundo partido, cuando el Madrid venció en el Palau (63-70).
Lele Molin, el entrenador, espera que su equipo 'sea capaz de sobreponerse después de un enorme esfuerzo tanto físico como mental como el de la Euroliga'. 'Tenemos una oportunidad de ganar en nuestra pista y empatar la Liga. De lo que estoy seguro es que iremos con mucha ilusión y una gran motivación a enfrentarnos con el Barcelona', añadió el italiano.
El alero estadounidense Clay Tucker mostró su optimismo. 'Este partido puede cambiar la temporada. Si somos capaces de ganar podríamos luchar para tener el factor cancha a favor y ésa es una gran ventaja. Pero habrá que jugar un partido durísimo durante 40 minutos para conseguirlo'.
'Nos están esperando durante toda la semana. Será un partido difícil, de los que se gana con corazón y energía', dijo Velickovic, en tanto el alero Carlos Suárez subrayó que habían 'agotado las fuerzas' contra el Power Valencia pero que iban a intentar recuperarse mental y físicamente. 'Queremos dar la campanada, aunque sabemos que va a ser complicado', apostilló Suárez.
'Es otro gran partido y si queremos ganarle al Barcelona tenemos que parar su puntos fuertes, recuperarnos y aprender de los errores de los últimos partidos contra ellos', adelantó D'Or Fischer.
'Somos un equipo que no puede mirar atrás. Podemos perder o ganar, pero ante nuestra afición no podemos pensar en cansancio o en lo que ha pasado en partidos anteriores. Es un partido contra el Barcelona y una gran oportunidad para nosotros', finalizó Molin.
Además del poco tiempo de preparación, el Real Madrid no sabrá hasta el último momento si podrá contar con Sergio Llull, que acabó el partido contra los valencianos con problemas en los gemelos. La participación de Sergio Rodríguez se antoja más complicada aún.
Enfrente, el Barcelona ha perdido los tres últimos partidos que ha jugado. Faltará Navarro.
MADRID, 18,00. TDP.
La última victoria madrileña en Liga fue el 26 de abril de 2008, cuando se impuso por 90-73 en el Palacio de Vistalegre, aunque en realidad el último triunfo es un poco más reciente, en los cuartos de final de la Euroliga de la pasada temporada, en el segundo partido, cuando el Madrid venció en el Palau (63-70).
Lele Molin, el entrenador, espera que su equipo 'sea capaz de sobreponerse después de un enorme esfuerzo tanto físico como mental como el de la Euroliga'. 'Tenemos una oportunidad de ganar en nuestra pista y empatar la Liga. De lo que estoy seguro es que iremos con mucha ilusión y una gran motivación a enfrentarnos con el Barcelona', añadió el italiano.
El alero estadounidense Clay Tucker mostró su optimismo. 'Este partido puede cambiar la temporada. Si somos capaces de ganar podríamos luchar para tener el factor cancha a favor y ésa es una gran ventaja. Pero habrá que jugar un partido durísimo durante 40 minutos para conseguirlo'.
'Nos están esperando durante toda la semana. Será un partido difícil, de los que se gana con corazón y energía', dijo Velickovic, en tanto el alero Carlos Suárez subrayó que habían 'agotado las fuerzas' contra el Power Valencia pero que iban a intentar recuperarse mental y físicamente. 'Queremos dar la campanada, aunque sabemos que va a ser complicado', apostilló Suárez.
'Es otro gran partido y si queremos ganarle al Barcelona tenemos que parar su puntos fuertes, recuperarnos y aprender de los errores de los últimos partidos contra ellos', adelantó D'Or Fischer.
'Somos un equipo que no puede mirar atrás. Podemos perder o ganar, pero ante nuestra afición no podemos pensar en cansancio o en lo que ha pasado en partidos anteriores. Es un partido contra el Barcelona y una gran oportunidad para nosotros', finalizó Molin.
Además del poco tiempo de preparación, el Real Madrid no sabrá hasta el último momento si podrá contar con Sergio Llull, que acabó el partido contra los valencianos con problemas en los gemelos. La participación de Sergio Rodríguez se antoja más complicada aún.
Enfrente, el Barcelona ha perdido los tres últimos partidos que ha jugado. Faltará Navarro.
MADRID, 18,00. TDP.
