En una jornada marcada por la lluvia en Wimbledon, el número uno del mundo, Novak Djokovic, fue uno de los pocos favoritos que pasó la ronda de octavos de final sin complicaciones, a la vez que el suizo Federer pasó penurias en la central y la rusa María Sharapova dio la sorpresa al caer eliminada en dos sets.
Djokovic disputó su encuentro en el último turno de la pista central, la única que cuenta con un techo retráctil para protegerla de la lluvia, en una jornada en la que cinco de los ocho encuentros de octavos de final del cuadro masculino quedaron pospuestos debido a las precipitaciones que aguaron la tarde al suroeste de Londres.
El serbio no tuvo problemas para superar de manera expeditiva a su compatriota Victor Troicki, por 6-3, 6-1 y 6-3 en una hora y media. 'No es fácil jugar contra un amigo tuyo. Disputamos nuestro primer partido cuando él tenía nueve años y yo ocho. Nos conocemos muy bien, pero siempre tiene que haber un perdedor', dijo Djokovic al terminar el encuentro.
Para Federer, en cambio, la ronda de octavos no fue un mero trámite y sufrió para terminar imponiéndose al belga Xavier Malisse por 7-6, 6-1, 4-6 y 6-3 en dos horas y 11 minutos.
Poco antes de la media hora juego, el suizo tuvo que retirarse al vestuario para recibir atención médica debido a uno de sus recurrentes dolores de espalda.
También sufrió, y en su caso no pudo superar sus problemas, la número uno del mundo, la rusa María Sharapova, que claudicó por sorpresa ante la raqueta de la alemana Sabine Lisicki por 6-4 y 6-3 en una hora y 24 minutos.
El serbio no tuvo problemas para superar de manera expeditiva a su compatriota Victor Troicki, por 6-3, 6-1 y 6-3 en una hora y media. 'No es fácil jugar contra un amigo tuyo. Disputamos nuestro primer partido cuando él tenía nueve años y yo ocho. Nos conocemos muy bien, pero siempre tiene que haber un perdedor', dijo Djokovic al terminar el encuentro.
Para Federer, en cambio, la ronda de octavos no fue un mero trámite y sufrió para terminar imponiéndose al belga Xavier Malisse por 7-6, 6-1, 4-6 y 6-3 en dos horas y 11 minutos.
Poco antes de la media hora juego, el suizo tuvo que retirarse al vestuario para recibir atención médica debido a uno de sus recurrentes dolores de espalda.
También sufrió, y en su caso no pudo superar sus problemas, la número uno del mundo, la rusa María Sharapova, que claudicó por sorpresa ante la raqueta de la alemana Sabine Lisicki por 6-4 y 6-3 en una hora y 24 minutos.
