Segunda Euroliga de su historia en París, en la misma ciudad en la que el equipo de fútbol conquistó su segunda Liga de Campeones. El Barcelona, el equipo prácticamente perfecto, fulminó al Olympiacos (86-68) en un gran partido de los de Xavi Pascual, que dominaron de principio a final.
En París, donde el Barcelona había perdido dos finales de esta competición (1991 y 1996), una de ellas injustamente, ha sido la ciudad en la que se coronaron los azulgrana, un equipo que lo ha ganado todo lo que ha disputado este año.
Fue la noche de Juan Carlos Navarro, el máximo anotador de la final, elegido mejor jugador del partido, el primer español en conseguirlo. Fue la de Ricky Rubio, que se ha convertido en el jugador más joven que levanta esta Copa, pero sobre todo fue la noche del Barcelona, que firmó un baloncesto de ensueño, el mismo que le había llegado hasta aquí.
Y por encima de todos, la dirección del entrenador, de Xavi Pascual, que ha dejado su impronta en este equipo, un conjunto que se ha convertido en la referencia del baloncesto europeo esta temporada.
Con una defensa perfecta y un ataque certero, desde dentro y desde fuera. Controlando el rebote y cerrando el aro con el carácter intimidador de Fran Vázquez. Si el Olympiacos, el mejor equipo ofensivo de la Euroliga, pretendía ganarle al Barcelona, el mejor defensor, pronto se demostró que eso era imposible.
Salvó un triple inicial de Kleiza, todas las ventajas fueron para los azulgrana, que firmaron un primer cuarto espectacular. Y así hasta el final del partido, hasta el 88-68 del marcador.
Ficha Técnica
Barcelona 88 - Olympiacos 68
Barcelona:
Ricky Rubio (9), Navarro (21), Mickeal (14), Ndong (7) y Lorbek (8); Fran Vázquez (6), Sada (7), Basile (6), Morris (8), Grimau, Lakovic y Trias.
Olympiacos:
Penn, Teodosic (10), Childress (15), Kleiza (13) y Schortsanitis (6); Bouroussis (9), Papaloukas (12), Halperim, Mavrokefalides (1), Vujcic (2), Vassilopoulos y Beverley.
Incidencias:
Asistieron 14.768 espectadores.
Fue la noche de Juan Carlos Navarro, el máximo anotador de la final, elegido mejor jugador del partido, el primer español en conseguirlo. Fue la de Ricky Rubio, que se ha convertido en el jugador más joven que levanta esta Copa, pero sobre todo fue la noche del Barcelona, que firmó un baloncesto de ensueño, el mismo que le había llegado hasta aquí.
Y por encima de todos, la dirección del entrenador, de Xavi Pascual, que ha dejado su impronta en este equipo, un conjunto que se ha convertido en la referencia del baloncesto europeo esta temporada.
Con una defensa perfecta y un ataque certero, desde dentro y desde fuera. Controlando el rebote y cerrando el aro con el carácter intimidador de Fran Vázquez. Si el Olympiacos, el mejor equipo ofensivo de la Euroliga, pretendía ganarle al Barcelona, el mejor defensor, pronto se demostró que eso era imposible.
Salvó un triple inicial de Kleiza, todas las ventajas fueron para los azulgrana, que firmaron un primer cuarto espectacular. Y así hasta el final del partido, hasta el 88-68 del marcador.
Ficha Técnica
Barcelona 88 - Olympiacos 68
Barcelona:
Ricky Rubio (9), Navarro (21), Mickeal (14), Ndong (7) y Lorbek (8); Fran Vázquez (6), Sada (7), Basile (6), Morris (8), Grimau, Lakovic y Trias.
Olympiacos:
Penn, Teodosic (10), Childress (15), Kleiza (13) y Schortsanitis (6); Bouroussis (9), Papaloukas (12), Halperim, Mavrokefalides (1), Vujcic (2), Vassilopoulos y Beverley.
Incidencias:
Asistieron 14.768 espectadores.
