Las bocinas, los coches con banderas españolas, los gritos en favor de España recorrieron también Ourense con la fuente de Concepción Arenal como centro neurálgico. Previamente, Cinebox, Teatro Principal y la Praza do Eirociño vibraron con la selección.
Ourense no fue menos que el resto de España y vibró con la selección en la final frente a Alemania. Primero en los puntos estratégicos donde los aficionados sabían que podían seguir el partido en pantalla grande y acompañados de otros seguidores de la Roja para animarse mútuamente si las cosas iban mal dadas (la sala cuatro del Cinebox en el Centro Comercial Ponte Vella, el Teatro Principal o la pantalla instalada en la Praza do Eirociño), y después con la explosión de júbilo desbordado al certificarse que España se convertía en la ganadora de la Eurocopa 2008, y nada menos que ante la todopoderosa Alemania, que tuvo que claudicar ante el despliegue de genio de los chicos de Luis.
Ourense se echó a la calle con el centro de la ciudad como lugar donde plasmar su entusiasmo y la fuente de Concepción Arenal como espacio en torno al cual desplegar todo el entusiasmo contenido durante horas.
Ourense se echó a la calle con el centro de la ciudad como lugar donde plasmar su entusiasmo y la fuente de Concepción Arenal como espacio en torno al cual desplegar todo el entusiasmo contenido durante horas.