Martín cree que 'si el Gobierno hubiera sido más claro sobre la situación de su hoja de ruta todos estaríamos más orientados'

La Banca española ganó 16.603 millones de euros en 2008, un 12% menos, y la morosidad se elevó al 2,39%

Epresidente de la Asociación Española de Banca  (AEB), Miguel Martín
Los bancos españoles lograron un beneficio neto atribuido de 16.603 millones de euros en 2008, un 12% menos que en el ejercicio 2007, después de destinar a insolvencias y dotaciones 15.726 millones de euros, más del doble que un año antes, según los datos presentados hoy por el presidente de la Asociación Española de Banca (AEB), Miguel Martín, para quien estos resultados demuestran que los bancos españoles 'han logrado capear el temporal y sobrevivir a la tormenta mientras que muchos de sus rivales no han podido hacerlo'. Para 2009, no espera que 'sean mejores que los de 2008', pero 'intentaremos que se aproximen lo máposible', dijo

En rueda de prensa, Martín aseguró que, pese a ser inferiores a los de 2007, los resultados de 2008 son 'saludables' en un año en que se produjo 'el colapso del sistema financiero internacional' y recordó que están por encima de los de 2006 'cuando la economía crecía cerca del 4%'. Además, los créditos a la clientes se elevaron un 6,9%, hasta 1,29 billones de euros y Martín destacó que la banca española tiene 'suficiente fortaleza' para 'absorber' las dotaciones y los incrementos de la morosidad. En este sentido, la mora consolidad de los bancos españoles se situó en el 2,39%. frente al 1% en 2007, y una cobertura del 91%, frente al 190% del año pasado.

El presidente de la AEB subrayó que la banca española ha resistido el temporal sustituyendo la financiación antes obtenida en los mercados recurriendo al Banco Central Europeo (BCE), realizando emisiones de pagarés a corto plazo y a través de la captación de depósitos de clientes. Asimismo, incidió en las fuertes dotaciones acometidas -más de 15.000 millones de euros- para provisiones e insolvencias y una cobertura aún holgada en comparación con los estándares europeos. Además, recalcó los 'colchones' de capital por encima de los mínimos regulatorios establecidos en Basilea y destacó la diversificación de las entidades financieras españolas que permite mantener el 'fuelle'.

Martín volvió a mostrarse muy crítico con las entidades que han recibido inyecciones de capital pública por considerar que se distorsiona el mercado. Por eso, considera que para compensar esta 'ayuda desproporcionada', se les debe 'obligar a una reestructuración explícita' para que no se deforme la competitividad y se garantice que el sistema 'sale fortalecido'. No obstante, la banca española no descarta las ayudas de capital pero a través del Fondo de Garantía de Depósitos. 'No pueden ser gratuitas', remarcó.

Mientras, Martín dijo desconocer la hoja de ruta del Ejecutivo, aunque si la hay 'me gustaría verla y comentarla', añadió. 'Si el Gobierno hubiera sido más claro sobre la situación de su hoja de ruta todos estaríamos más orientados', indicó. Sin embargo, 'comprendo que es una tarea difícil y que tiene que estar atento a lo que hagan sus colegas europeos', agregó.

Respecto a las líneas de liquidez del Instituto de Crédito Oficial (ICO) y las quejas que se están recibiendo de los clientes, Martín incidió en que el Consejo General de la AEB acordó la semana pasada 'por unanimidad adoptar el compromiso de contribuir de forma decisiva para garantizar el éxito de estas líneas con el objetivo de conseguir una mjero financiación para empresas y hogares'. 'La intención de los bancos siempre ha ido la de colaborar con el ICO', precisó, y, además en este caso 'es interesada porque si las líneas ayudan a los deudores nos ayudan a nosotros', añadió. 'Si hay discrepancias son en cómo se instrumentan las líneas, y esto lleva tiempo', admitió. En cualquier caso, cree que las quejas 'seguirán existiendo' y prevé que un 'importante' de número de pymes que cierren en los próximos meses.

Martín prevé que la crisis económica se prolongue durante 2009 y 2010 y estimó que España no saldrá de la recesión económica española antes de que lo hagan en Estados Unidos y Europa. 'Resignémonos', dijo, aunque esto 'no quiere decir que nos relajemos', matizó. El presidente de la AEB advirtió de que 'no tenemos que cometer errores' y reclamó 'medidas precisas para cuando salgan los demás subirnos al carro'. Abogó por aprovechar las lecciones de otros países, entre las que priorizó la de 'preservar el sistema financiero español, evitar romper el nivel de equidad y no segmentar el mercado'. 'Lo que ha ocurrido en el sistema bancario mundial es que se ha caído el modelo de hacer banca', precisó. Por eso, la salida de la crisis obliga a 'redefinir' el modelo del futuro. 'Se va a ir a modelos de supervisión más integrados, más globales, y a una nueva gestión de la liquidez y del riesgo', explicó Martín, quien confía en que España utilice la crisis para salir 'fortalecidos, no debilitados' y se mostró seguro de que las entidades españolas 'van a saber adaptarse' al nuevo escenario.



BAJAR LOS TIPOS



Preguntado por la salida del subgobernador del Banco de España, José Viñals, quien deja su cargo para ocupar el puesto de consejero Financiero y director de Asuntos Monetarios y Mercados de Capitales del Fondo Monetario Internacional (FMI), en sustitución de Jaime Caruana, quien a su vez se convertirá en director general del Banco de Pagos Internacionales a partir del 1 de abril, Martín aseguró que le parece 'magnífico' porque la salida de Caruana había provocado que España perdiera un puesto 'importantísimo' para el cambio del sistema financiero mundial. En cuanto a si éste es un buen momento para tomar esta decisión, el presidente de la AEB consideró que 'las cosas ocurren cuando ocurren y Viñals no puede decir: esperadme que voy a resolver la crisis y vengo dentro de dos años'.

Respecto a la política del BCE, Martín afirmó que 'todavía puede hacer más cosas' y así espera que sea porque el presidente de la máxima autoridad monetaria, Jean Claude Trichet, 'no las ha descartado'. En este sentido, prevé que la presión del G-20 provocará que el BCE vuelva a bajar los tipos, que actualmente están en el 1,5%, algo 'esencial' para que baje el tipo medio hipotecario, que se sitúa en el 5,64%. 'El margen real es el diferencial menos la morosidad y las dotaciones para provisiones, y éstas están subiendo', explicó el presidente de la AEB.

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