Los grupos del Parlamento Europeo reclaman a la CE actuar “rápido” frente al coste de la energía
España y Francia lideran la presión que ejercen varios países de la UE para que la Comisión Europea (CE) intervenga rápido y con medidas excepcionales para aplacar la escalada de precios del gas y la electricidad, mientras que Alemania cree que basta con reacciones a nivel nacional y con la legislación vigente. “Medias excepcionales para situaciones excepcionales”, repitió ayer la vicepresidenta tercera y ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, en Luxemburgo, donde ha participado en un consejo de ministros europeos de Medioambiente.
En España, el megavatio hora costará hoy 288 euros. Hace un mes se pagaba a 201 euros y hace un año a 81 euros. Pero pagarán aún más Italia (307 euros), Eslovenia y Croacia (306), Bélgica, Países Bajos y Alemania (302), Austria (301) y Francia (298). Y hasta que en primavera empiece a funcionar el gasoducto Nord Stream 2 desde Rusia a Alemania no se espera un alivio de los mercados.
España empezó a pedir una reacción europea en mayo, cuando empezó a subir drásticamente el precio del gas, cuyo encarecimiento repercute en la electricidad a través del sistema de precios marginalista, donde la tecnología más cara fija el precio del megavatio de las demás. En las últimas semanas se sumó a ese barco Francia, República Checa, Rumanía o Grecia. En la mesa hay ideas generales como la compra conjunta de gas o, a más largo plazo, reformar el mercado eléctrico y crear reservas de gas.
En este contexto, los grupos mayoritarios del Parlamento Europeo reclamaron ayer a la CE que actúe con urgencia y plantee cambios en el diseño de los mercados energéticos europeos. El pleno de la Eurocámara debatió sobre este asunto con la comisaria europea de energía, Kadri Simson, que avanzó algunas de las propuestas para atajar la crisis a corto plazo y para, en el futuro, emprender un potencial rediseño de los mercados de la energía y el gas.
