Los sindicatos advierten de que radicalizarán las protestas y estudian denunciar por ‘secuestro’ a Delegación del Gobierno

Ganaderos cortan el periférico de Santiago y los antidisturbios cargan en dos ocasiones contra ellos

Una de las cargas de los antidisturbios. (Foto: Vicente Pernía)
Centenares de ganaderos cortaron el tráfico en el periférico de Santiago a su paso por el polígono empresarial Costa Vella, después de que la policía les impidiese desplazarse en sus tractores, en una tercera jornada de protestas tensa, en la que los antidisturbios cargaron en dos ocasiones contra los manifestantes, uno de los cuales resultó herido.
Los productores lácteos tenían previsto trasladarse hasta diferentes supermercados para obligarles a cerrar pero los agentes antidisturbios impidieron que saliesen con los tractores del recinto del Mercado, en el que permanecen concentrados desde el pasado lunes para tomar parte en las actividades de la 'semana en blanco para la supervivencia del sector'. Como respuesta, los manifestantes se situaron en medio de la calzada del periférico y en otras vías del entorno, así como en la rotonda que da acceso al aeropuerto, y cortaron el tráfico.

Además, quemaron una de las señalizaciones de la carretera y un carro de la compra, por lo que intervinieron los bomberos para apagar el fuego. El tráfico interrumpido durante una hora y media y no fue hasta pasadas las 14.30 horas que se recuperó la circulación en la zona del polígono Costa Vella.

Los agentes antidisturbios --se trasladaron al lugar más de una decena de furgones policiales--, cargaron en dos ocasiones contra los ganaderos, una de ellas frente al supermercado Maxi Día. El segundo de los enfrentamientos se produjo cuando un grupo de manifestantes se dirigieron a un camión de Leche Río, parado en el acceso a la autovía a Lugo debido a los cortes de tráfico, y vaciaron parte de su carga.

Uno de ellos tuvo que ser trasladado por una ambulancia tras recibir un golpe en la cabeza.

‘SECUESTRO’


Los sindicatos agrarios reprocharon a la Delegación del Gobierno que no permitiese circular a los tractores y el secretario de Organización de Xóvenes Agricultores calificó la situación de ‘secuestro’. Así, avisaron de que, de no producirse un cambio de actitud por parte de las administraciones, se ‘endurecerán’ las protestas.

‘Estamos mirando con los abogados si es posible plantear una denuncia formal’ por secuestro, dijo Díaz, mientras que el secretario de acción sindical de Unións Agrarias, Javier Iglesias, afirmó que es ‘por lo menos reprochable’ la prohibición de salir con los tractores y señaló que ‘las manifestaciones en Galicia y en España no se autorizan, se comunican’. ‘Si hoy o mañana no hay un cambio de actitud por parte de la Delegación del Gobierno, vamos a endurecer todavía más las protestas’, advirtió.

‘PUEDE PASAR DE TODO’


‘Está ocurriendo lo que tenía que ocurrir, si no te dejan manifestarte al final acabas cortando la carretera y haciendo barricadas’, defendió Díaz, que explicó que la pretensión de los ganaderos era realizar ‘actos pacíficos’. ‘Cuando no puedes alimentar a los hijos puede pasar de todo’, advirtió y dijo que no se hace responsable de ‘lo que pueda pasar’.

Por su parte, la secretaria xeral del Sindicato Labrego Galego (SLG), Carme Freire, consideró que la ministra de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, Elena Espinosa, ‘empieza a ponerse nerviosa’ porque las movilizaciones de los ganaderos ‘la ponen contra las cuerdas’ y ‘manda cargas policiales’, criticó.

CIERRES DE SUPERMERCADOS


Además, los ganaderos obligaron a cerrar varios supermercados del entorno de Santiago. Varios grupos de manifestantes se distribuyeron desde el recinto de Amio y se trasladaron a MercaGalicia, en donde impidieron la actividad del centro logístico de Día.

Las grandes superficies comerciales ubicadas en el polígono de Costa Vella (Lidl, Maxi Día) y el Eroski de la localidad vecina de Sigüeiro.

Los tres sindicatos emitieron un comunicado conjunto en el que lamentaron las ‘molestias’ causadas a los ciudadanos, con los que también se produjeron situaciones de tensión puntuales, y justificaron que las propuestas ‘son fruto de la desesperación que vive el sector lácteo’.

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