El presidente de Bankia, Juan Ignacio Goirigolzarri, amenazó ayer con abandonar la entidad nacionalizada si el Gobierno reducía de forma importante la aportación de 23.500 millones de euros que reclamó para desarrollar su plan de saneamiento. La amenaza, de la que se hicieron eco varios medios de comunicación, procedía de fuentes próximas al máximo responsable de Bankia, quien entendería como una desautorización que se redujera aquella cantidad.
Pocas horas después el Ejecutivo reaccionaba ante la amenaza y daba por válida la cifra de 19.000 millones de dinero público que recibirá Bankia para llevar a cabo su plan de saneamiento y recapitalización. Estos 19.000 millones son adicionales a la conversión en capital del préstamo público por importe de 4.465 millones que recibió la entidad en 2010 para su constitución, con lo que el respaldo estatal se elevará a 23.465 millones de euros. Dicho respaldo, comprometido días atrás por el ministro de Economía, Luis de Guindos, se materializará una vez cumplido el procedimiento que pasa por la 'luz verde' del Banco de España, que articulará el apoyo público a través del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria una vez lo autorice su órgano de gobierno.
Así figura en el plan de saneamiento y recapitalización presentado por el presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri, al consejo de la entidad el 25 de mayo.
Por el contrario, el secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, insistió ayer en que hay que examinar la cifra de fondos públicos que necesita Bankia para recapitalizarse y aclarar si la metodología que la entidad ha usado para calcularla es 'la correcta', porque de lo contrario 'puede haber contaminación' al resto del sistema financiero en un momento en que está siendo examinado por auditoras privadas.
Así figura en el plan de saneamiento y recapitalización presentado por el presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri, al consejo de la entidad el 25 de mayo.
Por el contrario, el secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, insistió ayer en que hay que examinar la cifra de fondos públicos que necesita Bankia para recapitalizarse y aclarar si la metodología que la entidad ha usado para calcularla es 'la correcta', porque de lo contrario 'puede haber contaminación' al resto del sistema financiero en un momento en que está siendo examinado por auditoras privadas.
