Alfredo Enríquez Badas, el número dos de la lista de Sociedad Civil y Democracia (SCD) por Ourense, atribuye su salida del PP, donde fue coordinador de la campaña electoral en la emigración, a la actitud y al modelo político de Núñez Feijóo, que, además de decepcionarle, ha generado una gran confusión en los gallegos del exterior.
¿Por qué se ha ido del PP y dirigido sus pasos hacia SCD?
La respuesta es sencilla. Uno no cambia de la noche a la mañana. Yo soy alumno del pensamiento de Manuel Fraga y José Luis Baltar, que dignificaron la política. Con ellos, mis maestros, yo tenía una opinión y era escuchado pero hoy tenemos que aceptar lo que piensa una única persona; y el partido no es una sola persona, nadie debe arrogarse ese derecho.
¿Se refiere usted al actual presidente de la Xunta, Núñez Feijóo?
Sí, lamentablemente. Fui su coordinador de campaña pero ya renuncié en febrero a ir al Parlamento porque no estaba de acuerdo con la forma en la que se maneja el partido. Las cosas no están bien, yo conozco todos los concellos y sé lo que sucede en la emigración, pero ellos se limitan a sacar el discurso del arcón y prometer lo mismo que hace cuatro años.
¿Qué le reprocha, pues, a Feijóo?
Sobre todo, su falta de diálogo. De ser una persona que consultaba y permitía opiniones, pasó a encerrarse en el poder. Yo no creo en las verdades absolutas y Feijóo piensa que las tiene. Y me cansé de vivir entre rencores, soberbia y promesas no cumplidas.
¿Qué percepción tienen los emigrantes de la política que ejerce el actual presidente?
No es buena, están confundidos porque venían del modelo de Fraga y se encuentran con Feijóo, que se encierra y no cambia las cosas. No hay nada más que ver la lista por Ourense, las mismas personas algo recicladas; no hay recambio generacional. La emigración gallega está cansada de discursos vacíos, se sacrificó mucho, y no somos emigrantes de segunda. Además, si algo le fastidia a la emigración es que vayan ahora a hacer promesas cuando nos han quitado el derecho a votar en las elecciones municipales y nos han cambiado la legislación. Basta ya de compromisos vacíos.
¿Qué halló en Mario Conde para unirse a su proyecto político?
Él cumple, es una persona preparada, le hace bien a la democracia tener un líder como Conde.
¿Qué le ha dicho el presidente provincial del PP, Manuel Baltar, cuando le comunicó su baja? Porque lo sabía ¿no?
Me pidió que me quedara, pero mi decisión ya estaba tomada.
Le tocaría ahora ser concejal en Bande. ¿Va a renunciar o hará valer sus derechos aunque sea ya en nombre de SCD?
No lo sé. Tengo que hablarlo con Mario Conde, aún no lo hemos decidido.
Sería el primer concejal del nuevo partido.
Lo sería sí, ya veremos.
La respuesta es sencilla. Uno no cambia de la noche a la mañana. Yo soy alumno del pensamiento de Manuel Fraga y José Luis Baltar, que dignificaron la política. Con ellos, mis maestros, yo tenía una opinión y era escuchado pero hoy tenemos que aceptar lo que piensa una única persona; y el partido no es una sola persona, nadie debe arrogarse ese derecho.
¿Se refiere usted al actual presidente de la Xunta, Núñez Feijóo?
Sí, lamentablemente. Fui su coordinador de campaña pero ya renuncié en febrero a ir al Parlamento porque no estaba de acuerdo con la forma en la que se maneja el partido. Las cosas no están bien, yo conozco todos los concellos y sé lo que sucede en la emigración, pero ellos se limitan a sacar el discurso del arcón y prometer lo mismo que hace cuatro años.
¿Qué le reprocha, pues, a Feijóo?
Sobre todo, su falta de diálogo. De ser una persona que consultaba y permitía opiniones, pasó a encerrarse en el poder. Yo no creo en las verdades absolutas y Feijóo piensa que las tiene. Y me cansé de vivir entre rencores, soberbia y promesas no cumplidas.
¿Qué percepción tienen los emigrantes de la política que ejerce el actual presidente?
No es buena, están confundidos porque venían del modelo de Fraga y se encuentran con Feijóo, que se encierra y no cambia las cosas. No hay nada más que ver la lista por Ourense, las mismas personas algo recicladas; no hay recambio generacional. La emigración gallega está cansada de discursos vacíos, se sacrificó mucho, y no somos emigrantes de segunda. Además, si algo le fastidia a la emigración es que vayan ahora a hacer promesas cuando nos han quitado el derecho a votar en las elecciones municipales y nos han cambiado la legislación. Basta ya de compromisos vacíos.
¿Qué halló en Mario Conde para unirse a su proyecto político?
Él cumple, es una persona preparada, le hace bien a la democracia tener un líder como Conde.
¿Qué le ha dicho el presidente provincial del PP, Manuel Baltar, cuando le comunicó su baja? Porque lo sabía ¿no?
Me pidió que me quedara, pero mi decisión ya estaba tomada.
Le tocaría ahora ser concejal en Bande. ¿Va a renunciar o hará valer sus derechos aunque sea ya en nombre de SCD?
No lo sé. Tengo que hablarlo con Mario Conde, aún no lo hemos decidido.
Sería el primer concejal del nuevo partido.
Lo sería sí, ya veremos.
