Ni la amenaza de lluvia ni el aplazamiento desde el sábado anterior, motivado por el fallecimiento de un joven muy apreciado en el Concello, lograron frenar el desfile de Entroido de A Rúa. Con un recorrido reducido en unos cientos de metros, buscando acortar el tiempo y evitar la amenaza de lluvia, al final fueron 16 las comparsas que se animaron a sumarse a la comitiva.
En estos grupos pudieron verse disfraces de muy diferentes estilos. desde mejicanos o galletas hasta protagonistas de espectáculos circenses y trajes del medievo. También acudieron los intrépidos agentes del S.W.A.T. e incluso un grupo de astronautas con la nave Discovery.
No faltó el folión, un elemento que ya es casi obligado en todos los desfiles de Entroido que tienen como escenario las localidades de la comarca valdeorresa. En este caso, fueron los sonidos de los bombos y azadas del folión bolés de Buxán los que marcaron el ritmo en las calles de A Rúa. Este sábado, acompañado por las distintas músicas procedentes de los altavoces de las comparsas.
La comitiva recorrió las calles del centro del casco urbano de A Rúa, sin que las condiciones meteorológicas desluciesen el colorido del tradicional desfile del Entroido.
Una vez más, los agentes de la Policía Local recibieron el apoyo de los voluntarios de Protección Civil para que la fiesta se desarrollase sin ningún contratiempo.
