Cumplieron con la tradición de anunciar el comienzo de la celebración a la salida de misa y desfilaron por las calles de la villa
Las chocas y el látigo del cigarrón fueron los protagonistas ayer en el Entroido de Verín desde primera hora de la mañana. Cientos de cigarrones se concentraron a las 11,30 horas en la plaza del Concello con el objetivo de desfilar por las calles más céntricas y apostarse en los accesos a la iglesia parroquial, situada en la calle Mayor, y de la Merced, en la plaza con el mismo nombre, para anunciar a los vecinos y visitantes que es tiempo de diversión.
Los cigarrones se colocaron en fila delante de los templos para, como manda la tradición, dar un pequeño latigazo a cada uno de los feligreses a modo de saludo. Los fieles agradecieron el gesto repitiendo "ojalá que para el año me vuelvas a saludar".
El vistoso ritual no se le escapó al párroco que, tras su saludo, bendijo a cada uno de los presentes para que la fiesta discurriera sin incidentes. Eso sí, les recordó que una vez que pase la celebración del Entroido llega el Miércoles de Ceniza y la Cuaresma.
Los cigarrones son los protagonistas estos días en Verín, pero el próximo sábado , 14 de febrero, volverán a protagonizar otro acto vistoso, como es el "bautizo solemne" de los nuevos cigarrones y el homenaje a los que ya fallecieron. Este último se llevará a cabo en la plaza de O Cigarrón, en la que se colocará una "pañueleta" sobre la estatua que preside el recinto.
La ceremonia de ayer finalizó pasadas las 14,00 horas, pero la fiesta continuó durante toda la jornada en la calle, sobre todo en las plazas Mayor y García Barbón.
Las charangas Támega, Gramola y la orquesta Cinema se encargaron de animar el ambiente hasta la madrugada, mientras que la jornada soleada facilitó la afluencia de visitantes. Sobre las ocho de la tarde, las plazas citadas anteriormente estaban abarrotadas de personas disfrazadas, entre las que se podía apreciar incluso comparsas y carrozas.
El concejal de Festejos, Víctor Manuel Baladrón, se mostró satisfecho con la afluencia de público, lo que demuestra, a su entender, que el Entroido verinense va cada año a más y "está consolidado como una de las citas festivas más importantes de la provincia", apuntó.
La fiesta continuará el próximo día 12, con el "Xoves de Comadres", que reunirá un año más en la villa a cientos de mujeres disfrazadas procedentes de distintos puntos de la geografía nacional.
