La “troula” se concentró ayer en la Praza da Mercé y en la Praza Maior. La primera para el disfrute de los más pequeños y la segunda ubicación para la tradicional guerra de harina. Y es que Verín vivió ayer su Luns de Entroido, característico por ser el día fareleiro en el que la Praza Maior se tiñe de blanco. Y así fue.
Los verinenses llegaron a media tarde preparados con sacos de harina y vestimenta adecuada para la “lucha”. La fiesta estuvo asegurada y pequeños y mayores disfrutaron sin descanso. Allí estuvieron aocmpañados por la música de la discomóvil Mono y al anochecer por el grupo JB Son. En las calles de la villa, las charangas Noroeste y Jalácticos también amenizaron toda la jornada.
Mientras la harina volaba en la Praza Maior, los pequeños disfrutaron en la Mercé de su Entroido infantil con obradoiros característicos de la época y juegos tradicionales. A las 19,30 horas rieron de la mano de Uxía Lambona e a banda molona.
Cita de los mayores
Pero los pequeños y los entroideiros de a pie no fueron los únicos protagonistas de la jornada. Y es que en el centro de día Solleira del Concello también festejaron el Entroido: los mayores disfrutaron como niños con la charanga Noroeste bailando al compás de la música.
El Entroido de Verín se despide hoy hasta el 2024. La villa acogerá a las 16,30 horas el desfile de Entroido y la música amenizará la jornada con las orquestas Salsarena, Players y las charangas Tattoo, MIl 9, Los Támega, Noroeste y BB+. Más allá de la programación, el Martes de Entroido estará marcado por el luto de los cigarrones.
