Tras la primera salida de los felos, el pasado fin de semana, el Entroido se inauguró oficialmente en la villa macedana de la mano de los más pequeños, que, con sus manos, recuperaron una de las tradiciones más emblemáticas de la provincia: los compadres. Se trató de una iniciativa promovida por el ANPA del CEIP de Maceda y que se desarrolló en la Praza das Toldas con la colaboración de la Diputación, el Concello y la Asociación de Comerciantes de Maceda.
Precisamente, la agrupación de comerciantes dio comienzo a su particular concurso de mecos con el reparto de una serie de estructuras para animar a los vecinos a “vestirlas” y llenar así la localidad con ambiente “entroideiro”. Los mejores tendrán premio. Las fiestas seguirán en Maceda el día 11 con el Fiadeiro de Carguizoi.