Dedicación y mucho mimo es lo que requiere la elaboración del traje de Troteiro de Bande. En la recuperación de esta figura en el 2000, ha tenido mucha que ver Marisel Domínguez, encargada de la confección de decenas de trajes cuyo valor oscila entre 260 y 400 euros.
El imán que entrega hoy La Región recoge la máscara del Troteiro, una figura del Entroido que Bande recuperó con el cambio de siglo y que animaba esta fiesta en la localidad tiempo atrás, aunque su presencia llegó a desaparecer. "A miña nai, que ten 83 anos, recorda como de cativa un señor saía así vestido polo pobo (Santa Comba) aínda que non lle tiñan nome", recuerda María de los Ángeles Domínguez, Troteira y artista de la aguja, por cuyas manos han pasado muchos de los trajes que estos días desfilan por las calles de Bande. "Agora so os fago para a familia, pero para min é un orgullo", asegura.
La elegancia y sencillez del traje de Troteiro oculta un laborioso trabajo de confección desde las polainas, que hoy en día se adquieren a un artesano del cuero, hasta el sombrero, personalizado al gusto del consumidor. "Sen dúbida, o chapeu é o máis difícil de elaborar. Transformar o gorro de palla require moitas horas. Hai que forralo cunha tea cosida a man, engadirlle as postais vellas, aínda que hoxe colócanse imaxes variadas, o espello, os flecos...", relata Marisel, como la conocen todos en Bande.
Además del "chapeu", del que cuelga un o tapete de ganchillo que oculta la cara del troteiro, Domínguez se acuerda de los coloridos lazos que adornan el traje, con una base de camisa y pantalón blanco de tela de bata. "As cintas tamén dan moito choio. Cada unha é dun color (azul claro y oscuro, rojo, verde, amarillo, rosa y granate) e hai que facerlle os lazos a man", matiza, incapaz de calcular el número de horas que requiere elaborar cada traje. "Isto faise por paixón, non miras o reloxo. Podes estar un domingo enteiro ou o tempo que che deixa libre o traballo. Nesta sala estivemos cosendo moitas noites ata as tres da mañá", asegura.
Muchas de esas horas las lleva la elaboración de la capa blanca de ganchillo que los troteiros llevan a su espalda. En el gusto del Troteiro y de la maña de quien la elabora, está el diseño: desde figuras geométricas hasta flores. "Hai un veciño que leva o debuxo dun Troteiro que lle fixo a súa sogra", destaca la costurera, quien se decanta por un mo
