Las máscaras tradicionales de Xinzo y sus parientes en Verín, los Cigarrones, han salido a la calle para anunciar la llegada de los días grandes
Las máscaras tradicionales de Xinzo, que reciben el nombre de Pantallas, y sus parientes en Verín, los Cigarrones, han salido a la calle para, en el Domingo Corredoiro, anunciar a los vecinos de estos municipios de Ourense, provincia que cuenta con el ciclo de carnaval más extenso de España.
Después de las conmemoraciones de los domingos Fareleiro y Oleiro, estos personajes característicos del entroido ourensano han tomado el mando hoy y se han dejado ver por primera vez en uno de los rituales más ancestrales y mejor preservados de todo el noroeste peninsular.
Todo ello en la antesala de los días grandes de esta época, con la siguiente gran cita el próximo jueves, con el popular, y concurrido Xoves de Comadres, de Verín.
Pero, por el momento, y en pleno auge carnavalesco, Pantallas y Cigarrones, dos personajes de enigmática expresión -y también de misterioso origen-, han cobrado a lo largo de esta jornada todo el protagonismo.
Lo han hecho con sus brincos y sus carreras, bajo el ruido de las chocas y ayudados de la tiranía de sus látigos, en el caso de Verín, y del estruendo de las vejigas hinchadas, en Xinzo.
Casi siempre en pequeños grupos, estas figuras se caracterizan por recorrer, con el suficiente resuello para no desplomarse, las calles de las villas urbanas, trotando y saltando casi sin parar.
Así, en Verín, desde primera hora de esta mañana, más de doscientos Cigarrones se concentraron delante de la plaza consistorial y desfilaron por las arterias más céntricas hasta la Iglesia, donde esperaron a la salida de los fieles para recriminarles su acción pasada.
La institución eclesiástica quiso poner fin al Entroido en la antigüedad y quedó, por este motivo, como centro de las burlas carnavalescas, todo ello sin maldad.
De hecho, una especificidad de estos personajes de sonrisa sarcástica es que pueden ser insultados, pero, en cambio, no se les puede tocar, puesto que son una autoridad.
"Es uno de los días más especiales para nosotros", ha detallado un Cigarrón anónimo, que habló en nombre de todos y comentó que tienen que entrenarse durante meses para poder "soportar" los casi quince kilos de peso que llevan encima.
El teniente alcalde de Verín, Diego Lorenzo, explicó que para los habitantes del lugar esta es una de las fiestas más esperadas del año: "A uno se le ponen los pelos de punta cuando escucha a los Cigarrones".
El traje de éstos se compone de una careta con motivos animales, forrada en la parte posterior con pelo; una camisa blanca, chaqueta corta, un cinturón con seis campanas, medias también blancas y bordados, todo ello realizado a mano, un detalle que no es baladí. Al elevado coste del atuendo, hay que añadirle su voluminoso peso.
En Xinzo de Limia, las Pantallas, una figura menos ceremoniosa que sus parientes de Verín, han tomado igualmente las calles de esta localidad, en un ambiente festivo.
Las Pantallas se caracterizan por su carácter enérgico y viril, así como por la máscara, la cual representa un demonio de expresión amable, y, además, por las dos vejigas que ellos hacen chocar en las manos.
"Son las autoridades del carnaval", detalla a Efe el presidente de la Sociedad Antropológica Gallega (SAGA), Miguel Losada, quien afirma que unos y otros, Pantallas y Cigarrones, "representan básicamente lo mismo", a pesar de que "tienen detalles diferentes".
En Galicia, las leyes ya no rigen ahora como de costumbre, con la excepción de las propias del carnaval, que en la zona recibe el nombre de "entroido".
