En tarde del domingo, la localidad de A Pobra de Trives tenía su primera gran cita del Entroido de este año, el “Desfile de Boteiros e folións” organizado por la Asociación Os Labregos. El ambiente que se palpaba era de ilusión como explica el presidente de Os Labregos, Javier Rodríguez: “Despois destes anos coa pandemia pois a este témoslle especiais gañas xa que as restriccións quedaron atrás e este volve a ser con total normalidade”.
La tarde se presentó soleada, con la cima de la montaña luciendo su manto blanco y cientos de vecinos y visitantes en las calles trivesas dispuestos a gozar de uno de los desfiles de foliones más numerosos de la provincia.
Pasadas las 15,00 horas daba comienzo en desfile, que se encargaba de abrir el grupo anfitrión Os Labregos. Bombos, cornas, azadas y demás aperos junto a las mázcaras y boteiros se reunían en la finca da Barreira como punto de inicio. Os Labregos, seguidos de 12 foliones llegados de diferentes puntos de la provincia, llenaban de ritmo y color la villa trivesa, recorriendo el casco viejo para acabar en la Praza do Reloxo. El sonido atronador de los foliones, con el ir y venir de boteiros sumado al elegante baile de las mázcaras dejaron manifestado, una edición más, que el entroido del oriente ourensano sigue más vivo que nunca y en el que el relevo está asegurado, desfilando niños, padres y abuelos unidos por la magia de los foliones.
A los anfitriones les seguían los foliones de Piñeiro, Chandrexa de Queixa, Buxán, Viticultores de Vilamartín, Caniceira, A Veiga, As Maceiras, Os Arrieiros de Petín, Amigos polo folión de Vilariño de Conso, Carracedo da Serra da Gudiña, el fulión de Manzaneda y, cerrando el desfile, Fradelo. Trives acogió alrededor de 700 participantes este año en esta actividad que ya va por su décima octava edición.
Al finalizar la asociación organizadora convidaba a una cena elaborada con productos triveses a todos los foliones. “Como sempre, na cea final ponse todo de productos da nosa zona e nós mesmos preparamos todo. Chourizos, orella, empanada e por suposto, bica de Trives, viño e licores non faltan”, añade Javier Rodríguez.
Sin duda, en la localidad todos coinciden en que este desfile marca el día grande del entroido en el municipio y su presidente manifestaba que “todo saíu ben, levamos traballando neste desde que remata o nadal, nós vivímolo e penso que a xente se foi contenta”.
Tras la cena, el concello trivés puso el broche a la fiesta con la actuación de la orquesta París de Noia en la calle San Martín.
