Muiños, Bande y Celanova disfrutaron ayer de una intensa jornada de fiesta. A las 09,00 horas ya salían los troteiros para hacer su recorrido por todas las aldeas de Bande, acompañados de la música de la Asociación Cultural Xirandela, sumaban en torno a los 60 participantes, que eran esperados y muy bien recibidos por los vecinos, que después de dos años sin celebración por causa de la pandemia echaban en falta esta tradicional figura del Entroido, recuperada en el año 2000.
Os Troteiros volverán a desfilar los días 19 con los Gaiteiros de Cadós, en que también habrá cocido troteiro y desfile de comparsas y carrozas; retomando su ruta el 21, ya para despedirse hasta el próximo año.
La troula arrancaba en Muiños con los cabreiros realizando una ruta por el rural, que continuará el próximo 18 de febrero. Desde Barxés hasta Rañadoiro, pasando por Vilar de Cas, Santuario, Porqueirós, As Maus, Requiás, Guntumil, Xermeade, Prado y Parada, los cabreiros hicieron sonar sus chocas animando a los vecinos de cada lugar que les brindaban un caluroso recibimiento.
En Celanova, las mujeres fueron las protagonistas de una cena-baile de comadres, que después de un recorrido por la localidad, celebraron en el salón de actos del claustro. Participaron un total de 175, a las que se sumaron los hombres pasada la medianoche.
Asimismo, la Asociación Castro de Santa Lucía, en Castrelo de Miño, ha recuperado este año la tradicional figura de este municipio, los peteiráns, que se presentaron ayer a las autoridades locales, y que tienen previsto desfilar el próximo 19 en Freás y el 21 por todo el Concello.
