Garzón toma declaración a los detenidos en la operación contra las mafias rusas

Agentes de la Guardia Civil escoltan a una mujer detenida  (Foto: efe)
El juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón se desplazará a Palma de Mallorca para tomar declaración por la mañana a los detenidos en este lugar relacionados con la operación contra las mafias rusas asentadas en el país.
Una vez ultimados estos interrogatorios, el magistrado viajará hasta Málaga para escuchar las declaraciones de los arrestados en la Costa del Sol, informaron fuentes jurídicas a Europa Press.

Durante la mañana del lunes, Garzón concluirá los interrogatorios en su juzgado de la Audiencia Nacional, a donde serán trasladados los detenidos en las provincias de Madrid, Valencia y Alicante, confirmaron las mismas fuentes.

Aunque hasta ahora son 18 los detenidos, acusados de asociación ilícita y blanqueo de capitales, el magistrado ha cursado una treintena de órdenes de detención. La mayoría de los arrestados se encuentran repartidos en dependencias policiales de Málaga, Palma de Mallorca y Madrid, ciudad esta última en la que han sido arrestados los presuntos responsables de la estructura financiera de la banda.

Según indicaron fuentes de la investigación, la denominada operación 'Troika', dirigida por la Comisaria General de la Policía Judicial, tiene como objetivo la 'Tamboskaya', un grupo criminal ruso que toma su nombre de una localidad próxima a San Petersburgo.

Entre los 18 detenidos figuran importantes responsables de esta asociación criminal, residentes en Nerja y Marbella, en la provincia de Málaga. En estas localidades se están practicando registros, en lujosos chalés donde residían los capos y sus familias.

Las investigaciones se iniciaron hace más de un año y han contado con la colaboración de servicios de información extranjeros. El Juzgado de Instrucción número 5 de la Audiencia Nacional acusa a los detenidos de los delitos de asociación ilícita y blanqueo de capitales, ya que, según explicaron las citadas fuentes, la mafia rusa se dedicaba en España a gastar y dar apariencia legal al dinero que conseguían a través de delitos cometidos en otros países.

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