La crisis que afecta a los mercados financieros es el argumento esgrimido para eludir este debate

Gobierno y PSOE insisten en descartar el adelanto electoral

El ministro de la Presidencia, Ramón Jáuregui. (Foto: RAÚL SANCHIDRIÁN)
El Gobierno ratificó ayer su 'firme voluntad' de agotar la legislatura para concluir las reformas, sacar adelante los presupuestos de 2012 y seguir reduciendo el déficit, compromisos que considera ineludibles ante los constantes ataques a la deuda por parte de los mercados. Fue el ministro de la Presidencia, Ramón Jaúregui, quien salió a la palestra para intentar zanjar el debate sobre un hipotético adelanto electoral y, en un comunicado colgado en la página web de La Moncloa, ejerció de portavoz del Ejecutivo.
'En este momento no habría nada más inestable y perjudicial para la solvencia y la credibilidad de España que una convocatoria anticipada de elecciones', recalcó .

El debate había comenzado a primera hora después de que un diario de tirada nacional habitualmente próximo al Gobierno, defendiera en su editorial la necesidad de convocar de forma inmediata las elecciones generales.

La coordinadora de la campaña socialista, Elena Valenciano, respondió rápido alertando de que ése era 'un mal debate' en una semana 'complicada' para los países de la Eurozona, que celebran el jueves una cumbre en Bruselas para definir el nuevo rescate a Grecia y calmar las dudas sobre los Estados periféricos de la UE. 'Introducir incertidumbre política en una situación de clarísima incertidumbre financiera no ayuda ni a los intereses de España ni de la UE', subrayó Valenciano.

La cita del jueves es considerada clave por el Gobierno y, de hecho, el jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, se reunió ayer en el Palacio de La Moncloa con la vicepresidenta de Asuntos Económicos, Elena Salgado, para prepararla.


OTRA LEY ELECTORAL

El coordinador general de Izquierda Unida, Cayo Lara, también tomó parte en el debate y aseguró al respecto que le es 'indiferente' que haya o no elecciones anticipadas y sólo pidió 'margen suficiente' antes de los comicios para poder diseñar una ley electoral más proporcional.

Tampoco quiso pronunciarse el presidente de la CEOE, Juan Rosell, porque para los empresarios, dijo, lo fundamental son las reformas 'urgentes e imprescindibles' que necesita el país y que debe afrontar Rodríguez Zapatero si se siente 'suficientemente fuerte y respaldado'. Si no es así, que 'deje paso a unas elecciones', ha apostillado.

Desde el País Vasco, el lehendakari, Patxi López, se mostró convencido de que Zapatero convocará las elecciones 'cuando crea que más le conviene a España' y el presidente del Senado, Javier Rojo, coincidió en que primará el interés general.

También mostró su confianza en Rodríguez Zapatero el presidente del Congreso de los Diputados, José Bono, quien ha sostenido que el jefe del Ejecutivo está 'más cualificado para juzgar los intereses de los españoles que el periódico de Prisa' a la hora de decidir la fecha electoral y 'debe hacer lo que tiene que hacer'.

El ministro de Industria, Miguel Sebastián, también aludió al tema asegurando que no suele comentar editoriales y 'mucho menos los del 18 de julio'.

Te puede interesar