Llamazares dice que con siete escaños de IU estaría satisfecho

Gaspar Llamazares.
El candidato de Izquierda Unida (IU) a la presidencia del Gobierno, Gaspar Llamazares, sostuvo hoy que tras una legislatura 'a la carta' donde el PSOE ha tenido un 'margen de maniobra muy amplio' para negociar con las fuerzas políticas, en el próximo mandato el Gobierno tendrá que decir 'qué quiere ser de mayor': 'Si conservador e insolidario, o de izquierda', explicó.
Así, en declaraciones a Telecinco recogidas por Europa Press, se mostró convencido de que el PSOE ganará las próximas elecciones generales, y afirmó que, en ese caso, su organización aspirará a llegar a un 'acuerdo sólido' con los socialistas, y por tanto, a tener responsabilidades en el Ejecutivo. 'Primero hablaremos de programa, y si llegamos a un acuerdo sólido hablaremos también de ministerios', explicó.

En este sentido, indicó que esta legislatura ha sido 'excepcional' porque se produjo después de una 'crisis' como la vivida con la Guerra de Irak y el atentado del 11-M, pero que tras la próxima cita electoral se hablará de un Gobierno 'consolidado' e Izquierda Unida influirá para que haya 'un menú de calidad de izquierdas'. 'Vamos a intentar que no solamente haya influencia de IU, sino determinación', dijo.

PSOE CON MAYORÍA 'GIRARÍA A LA DERECHA'

Asimismo, el máximo dirigente de IU insistió en que 'no sería bueno' que el PSOE consiguiera una mayoría absoluta porque se corre el riesgo de que 'se pase de frenada', y agregó que 'la experiencia demuestra' que los Gobiernos socialistas con mayoría son 'prepotentes y giran a la derecha'. 'Los ciudadanos no quieren un Gobierno de mayoría absoluta que reedite los errores de González, ni uno que tenga que pactar con la derecha nacionalista, y hacer concesiones conservadoras', añadió.

En este punto, reiteró que el PP está 'desahuciado' y no supone una alternativa al tiempo que acusó a esta formación, junto con Batasuna, de sembrar la abstención. Además, reprochó que el PSOE 'intenta rebañar' los votos de 'la izquierda transformadora y del nuevo voto'. Por ello, llamó al electorado obrero y también al joven porque, a su juicio, 'solamente Gobiernos plurales de izquierda han realizado políticas de cambio en nuestro país'.

En referencia a los debates entre el candidato socialista a la Presidencia, José Luis Rodríguez Zapatero, y el del PP, Mariano Rajoy, señaló que el primero fue 'anodino' y no convenció 'ni siquiera a los forofos', y auguró que en el 'cara a cara' que se celebrará esta noche también habrá 'mucho reproche, subasta electoral y propuestas sin ningún tipo de fundamento'.

De este modo, valoró el duelo como 'un debate frustrado y con una expectativa mediática que pretende convertir la política en salsa rosa', y donde, lamentó, falta su formación.

INMIGRACIÓN NO DETERIORA LOS SERVICIOS PÚBLICOS

El candidato también mantuvo que el 'deterioro' de los servicios públicos no se debe a la inmigración, sino a la 'falta de voluntad política y de financiación'. De esta manera, reivindicó que España debe aproximar su gasto social al europeo, pues, dijo, hay una diferencia de '70.000 millones de euros'.

Por último, manifestó que estará 'satisfecho' si IU consigue siete escaños tras el próximo 9-M y obviamente, afirmó, estará 'encantado' si logra más diputados. 'El resultado electoral influye: un resultado positivo me reforzará y uno menos positivo, me debilitará', concluyó.

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