Una joven de 20 años fue denunciada en Málaga por maltratar a su madre, a la que encerraba en una habitación dándole sólo una fruta al día. La Policía descubrió la situación tras una pelea entre la acusada y su novio.
Una mujer de 51 años denunció ante la Policía Local de Málaga a su hija, de 20, porque la encerraba en una habitación y sólo le daba de comer una fruta al día. La joven, que no quiso prestar declaración ante la Policía y que no fue detenida, ha sido imputada por un delito de malos tratos y el instructor del caso ha fijado fecha para un juicio rápido.
Los hechos se descubrieron el pasado miércoles cuando una patrulla de la Policía Local se desplazó hasta la Avenida Moliére de la capital malagueña tras recibir una llamada en la que se alertaba sobre una pelea en la vía pública entre una pareja, aunque cuando los agentes llegaron no encontraron a nadie. Fue entonces cuando indagaron en la zona y llegaron al domicilio donde se encontraba la joven, que había discutido con su novio y tenía las manos llenas de sangre, aunque no quiso presentar denuncia contra él.
Le quitaba el dinero
Los agentes se fueron de la vivienda, pero esperaron a que la joven saliera para volver y hablar con la madre, que había mostrado una actitud temerosa con la cabeza agachada durante la conversación de la Policía con la hija. La mujer, además de explicar que su hija la encerraba durante temporadas en una habitación y sólo le daba una fruta para comer, indicó que le quitaba el dinero y que en numerosas ocasiones le había pegado, incluso cuando dormía sedada por una fuerte medicación.
Los hechos se descubrieron el pasado miércoles cuando una patrulla de la Policía Local se desplazó hasta la Avenida Moliére de la capital malagueña tras recibir una llamada en la que se alertaba sobre una pelea en la vía pública entre una pareja, aunque cuando los agentes llegaron no encontraron a nadie. Fue entonces cuando indagaron en la zona y llegaron al domicilio donde se encontraba la joven, que había discutido con su novio y tenía las manos llenas de sangre, aunque no quiso presentar denuncia contra él.
Le quitaba el dinero
Los agentes se fueron de la vivienda, pero esperaron a que la joven saliera para volver y hablar con la madre, que había mostrado una actitud temerosa con la cabeza agachada durante la conversación de la Policía con la hija. La mujer, además de explicar que su hija la encerraba durante temporadas en una habitación y sólo le daba una fruta para comer, indicó que le quitaba el dinero y que en numerosas ocasiones le había pegado, incluso cuando dormía sedada por una fuerte medicación.
