Una o varias personas han quemado esta madrugada con líquido inflamable el coche particular del alcalde de la localidad mallorquina de Sóller, Carlos Simarro (PP), quien ha calificado este acto de 'terrorismo callejero' impropio de una isla como Mallorca.
Simarro ha relatado que el suceso ocurrió sobre las dos y media de esta madrugada, minutos después de que llegara a su domicilio de Sóller en un coche diferente al que sufrió el acto vandálico.
Una vez dentro de su casa, el primer edil ha explicado que oyó una explosión y cuando salió a ver qué ocurría vio su coche cubierto de unas llamas que alcanzaban el primer piso del edificio.
El alcalde ha indicado que los cuerpos de seguridad están ahora investigando los hechos para intentar localizar a los autores, los cuales para Simarro solo han podido tener motivaciones políticas a la hora de llevar a cabo esta acción.
'En Sóller no hay ninguna situación conflictiva, ha sido un verano turístico bueno, no hay ningún motivo social de alarma, pero aún así hay alguien que no me quiere bien. Me parece terrorismo callejero y una barbaridad', ha opinado.
'Estoy seguro de que esto es de alguien enfermo. Soy una persona absolutamente normal y por lo tanto el único motivo posible es por un tema político', ha reiterado.
Aunque el dirigente popular ha asegurado que él no teme por su integridad física, ha solicitado a la Delegación de Gobierno en Baleares medidas extraordinarias de seguridad tanto para él como para el resto de concejales, que aún se tienen que concretar en forma de vigilancia o de escolta.
Ha recordado que hace un par de meses, cuando se dictó la ampliación de la zona ORA de aparcamiento en Sóller, su consulta veterinaria apareció pintada y sellada con silicona, lo mismo que varios parquímetros de la localidad.
En un comunicado, el secretario general del PP balear, Miquel Vidal, ha condenado este acto vandálico. 'Parece mentira que en un pueblo culto como Sóller se puedan producir hechos como este; estoy seguro de que todos los sollerics, con su sentido común, condenarán este acto que ya se ha salido de madre', afirma el dirigente popular.
Una vez dentro de su casa, el primer edil ha explicado que oyó una explosión y cuando salió a ver qué ocurría vio su coche cubierto de unas llamas que alcanzaban el primer piso del edificio.
El alcalde ha indicado que los cuerpos de seguridad están ahora investigando los hechos para intentar localizar a los autores, los cuales para Simarro solo han podido tener motivaciones políticas a la hora de llevar a cabo esta acción.
'En Sóller no hay ninguna situación conflictiva, ha sido un verano turístico bueno, no hay ningún motivo social de alarma, pero aún así hay alguien que no me quiere bien. Me parece terrorismo callejero y una barbaridad', ha opinado.
'Estoy seguro de que esto es de alguien enfermo. Soy una persona absolutamente normal y por lo tanto el único motivo posible es por un tema político', ha reiterado.
Aunque el dirigente popular ha asegurado que él no teme por su integridad física, ha solicitado a la Delegación de Gobierno en Baleares medidas extraordinarias de seguridad tanto para él como para el resto de concejales, que aún se tienen que concretar en forma de vigilancia o de escolta.
Ha recordado que hace un par de meses, cuando se dictó la ampliación de la zona ORA de aparcamiento en Sóller, su consulta veterinaria apareció pintada y sellada con silicona, lo mismo que varios parquímetros de la localidad.
En un comunicado, el secretario general del PP balear, Miquel Vidal, ha condenado este acto vandálico. 'Parece mentira que en un pueblo culto como Sóller se puedan producir hechos como este; estoy seguro de que todos los sollerics, con su sentido común, condenarán este acto que ya se ha salido de madre', afirma el dirigente popular.
