Dos imputados y cuatro policías locales heridos, así como varios vecinos contusionados, es el balance de una reyerta multitudinaria.
La pelea tuvo lugar el martes por la tarde en las inmediaciones de la iglesia evangelista del barrio de Sant Roc de Badalona (Barcelona).
Según explicó un portavoz de la Policía Local, siete agentes estaban sobre las 16.30 horas imponiendo multas a vehículos mal aparcados en la calle Simancas, donde habitualmente se producen infracciones en el estacionamiento, sobre todo cuando hay algún evento en el centro religioso.
Unos seis jóvenes les increparon y agredieron, mientras otros vecinos del barrio se fueron añadiendo a la pelea, llegándose a congregar más de un centenar de personas, por lo que los agentes pidieron refuerzos y la presencia de los Mossos d'Esquadra.
Cuatro agentes sufrieron heridas leves debido a que varios de los presentes les propinaron golpes con cinturones, y en el choque, también varios vecinos resultaron contusionados.
La Policía identificó a dos personas, a quienes imputan un delito de desobediencia grave y otro de resistencia a la autoridad, aunque nadie fue detenido para evitar que se produjeran más altercados.
Las unidades de proximidad de la Guardia Urbana, que son los que normalmente operan en el barrio, se desplazaron al lugar y mediaron con algunos portavoces de los vecinos, y pudieron pacificar la situación.
Según explicó un portavoz de la Policía Local, siete agentes estaban sobre las 16.30 horas imponiendo multas a vehículos mal aparcados en la calle Simancas, donde habitualmente se producen infracciones en el estacionamiento, sobre todo cuando hay algún evento en el centro religioso.
Unos seis jóvenes les increparon y agredieron, mientras otros vecinos del barrio se fueron añadiendo a la pelea, llegándose a congregar más de un centenar de personas, por lo que los agentes pidieron refuerzos y la presencia de los Mossos d'Esquadra.
Cuatro agentes sufrieron heridas leves debido a que varios de los presentes les propinaron golpes con cinturones, y en el choque, también varios vecinos resultaron contusionados.
La Policía identificó a dos personas, a quienes imputan un delito de desobediencia grave y otro de resistencia a la autoridad, aunque nadie fue detenido para evitar que se produjeran más altercados.
Las unidades de proximidad de la Guardia Urbana, que son los que normalmente operan en el barrio, se desplazaron al lugar y mediaron con algunos portavoces de los vecinos, y pudieron pacificar la situación.
