La empresa viguesa Fluidmecánica acaba de finalizar la fabricación de un equipo para el mayor barco rompehielos nuclear del mundo, el ruso “Arctic”
Fluidmecánica pone fin a uno de los contratos más importantes de su historia. La empresa viguesa embarca estos días con destino a Rusia el equipo de remolque que construyó para el “Arctic”, el barco rompehielos más grande del mundo, de propulsión nuclear. En los últimos días se realizó el proceso de validación y las pruebas de la maquinaria para su envío a San Petersburgo, donde se está fabricando el buque.
La compañía, que tiene sus instalaciones en el entorno de Beiramar, construyó las máquinas que harán el remolque, un conjunto de tambores que son los que lanzan el cabo que va desde el barco que está en peligro y que es preciso rescatar. Será capaz de soportar hasta 500 toneladas de peso.
Se trata de un diseño muy innovador que encumbra a la firma viguesa a lo más alto en este sector ya que es algo único y referente en la navegación polar.
Fluidmecánica tiene otros contratos en vigor como hélices y unos equipos para el Instituto de Oceanografía de Ucrania y Rusia es hoy su principal cliente en el naval -supone un 60 por ciento de su negocio- y trabaja tanto con empresas privadas como públicas. El sudeste asiático y países europeos como Reino Unido, Italia o Alemania son otros de sus mercados principales, mientras que España lo es en menor medida. El extranjero supone el 80 por ciento de su facturación anual, que el año pasado rondó los 10 millones de euros sólo en la fábrica de Vigo. Y es que la compañía tiene delegaciones en otros puntos del territorio nacional como Cádiz, Ferrol y Cartagena para trabajos de instalación, mantenimiento naval e industrial y proyectos militares en el caso de la planta gaditana.
En total, el grupo emplea a más de 150 personas, de las que 35 están en Vigo, donde se fundó en el año 1977 y cuenta con unas instalaciones de 1.800 metros cuadrados en la calle Coruña.
Rompehielos
El “Arctic”, de 173 metros de eslora, es el mayor rompehielos del mundo. Estos buques son los encargados de liberar del hielo a los barcos que se quedan bloqueados y están diseñados para navegar a través de aguas cubiertas de hielo, por lo que es necesario que tengan un casco totalmente reforzado.
Fluidmécanica ya tiene otras experiencias en contratos de este tipo ya que instaló maquinaria en otros rompehielos como es el caso del “Nevskaya Zastava”, un barco de menores dimensiones (es de río) y que también da servicio a San Petersburgo.
