”Soy un tipo que cuenta cuentos y resulta que tengo la suerte de que llegan a mucha gente”, afirmó ayer en el Foro La Región el escritor Manel Loureiro, quien realizó una ponencia en la que el público tuvo un gran protagonismo.
Loureiro, que fue presentado por el también escritor Xosé Manuel Pacho, empezó la conferencia asegurando que solo se pueden contar 36 historias. Para justificarlo, contó un relato a los asistentes, que tenía el reto de adivinar quién era el protagonista de la misma. Los asistentes respondieron que se trataba de Jesús, pero se equivocaron, ya que Loureiro indicó que era E. T. “Si se dan cuenta Jesucristo y E. T. no se parecen en nada, pero, sin embargo, es la misma historia”, reflexionó. En este sentido, señaló que hay 36 arquetipos que se repiten una y otra vez, “esto lo descubrió un filólogo italiano en el siglo XVIII”.
"El objetivo final es ser capaz de escribir una historia que sea tan buena que quien la esté leyendo, quien esté pasando las páginas, diga eso de cinco páginas más y lo dejo; que quiera pasar las ultimas páginas despacito... El objetivo es que cuando llega el final sientas esa pérdida, porque es doloroso ser consciente de que has vivido con los protagonistas una maravillosa vida"
El escritor señaló que estos arquetipos se producen “porque somos humanos y estamos programados para contar y que nos cuenten historias, cualquier emoción humana es la que permite que avancen”. El camino para empezar una novela, según indicó, empieza cuando llega una idea “que puede ser una gran historia y piensas que crees que podrías escribirla”.
Tras ello, Loureiro indicó que hay que estructurar la historia para no perderse. “Hay dos tipos de escritores: los de mapa, que antes de empezar a escribir elaboran un mapa completo de cómo es la historia, y los de brújula, que empiezan a escribir guiados por su instinto”, explicó. En base a su experiencia, cree que lo ideal es estar en un paso intermedio entre ambas.
“Toda historia avanza en base a dos pactos: la suspensión de la incredulidad, cuando ves una película sabes que es de mentira, pero hacemos un pacto implícito que hace que nos olvidemos por completo de eso, aunque es una burbuja que se puede romper fácilmente; y la gratificación, si estoy contando una historia tú quieres que haya una resolución y es muy importante cumplir con la promesa con el lector”, manifestó.
El siguiente paso, según comentó, es la documentación, “es algo fundamental porque te va a dar los elementos que necesitas para montar ese lego que va a ser tu historia”. “Escribir sobre algo que conoces muy bien te ahorra la mitad del trabajo de documentación y te hace estar más seguro a la hora de escribir, pero tienes que tener una historia muy potente”, señaló.
“Les hago una biografía completa a todos los personajes, aunque la mayoría de esos datos no vayan a aparecer en el libro"
Posteriormente, hay que elegir quién va a protagonizar la historia. “Les hago una biografía completa a todos los personajes, aunque la mayoría de esos datos no vayan a aparecer en el libro, porque me ayuda a entender quiénes son y por qué actúan de una forma u otra”, confesó. En esta parte, indicó que el problema no está en los principales, sino en los secundarios que “hacen lo que les sale de las narices”. “En una de mis novelas aparecía un gato que acabó teniendo hasta un club de fans en Facebook, por lo que no lo pude matar, me tenía que durar 80 páginas y lo tuve que arrastrar durante tres libros”, contó.
"La primera versión de cualquier historia siempre está mal"
Después de seguir estos pasos, llega el momento de empezar a escribir y una vez acabada, según explicó Loureiro, llega el momento de que lo valore la editorial. “Lo primero que hacen es corregirlo y te lo devuelven pintado en rojo de arriba a abajo y es el mejor antídoto contra el ego de un escritor”, indicó.
En este sentido, señaló que la primera versión de cualquier historia siempre está mal. “Una historia no deja de ser como una sinfonía, donde hay un montón de partituras flotando y sonando al mismo tiempo y tienes que conseguir que suenen todas al unísono y eso exige, a veces, de la ayuda de un editor”, comentó. Una vez revisado, solo queda elegir la portada.
Éxito de los escritores
“En España debemos ser en torno a 125 autores que vivamos solo de escribir, somos muy poquitos”, aseguró Loureiro, quien indicó que la fórmula del éxito es “un 80% de trabajar como un loco, un 5% de talento y un 15% de suerte”. Por ello, señaló que el objetivo final “no es vender cientos de miles de ejemplares, sino ser capaz de escribir una historia que sea tan buena que quien la esté leyendo pase las páginas sin poder parar”.
El escritor reivindica los clubs de lectura
El escritor pontevedrés Manel Loureiro reivindicó ayer en el Foro La Región la importancia que tienen los clubs de lectura en la sociedad. “Permiten hacer lecturas en grupo, que siempre resulta más divertido, y sirven también para que cuando uno de sus miembros esté escribiendo algo se lo pueda enseñar a los demás y comentarlo en grupo. Además, si te tienen que criticar que sea mirándote a los ojos”, incidió. Por ello, dejó caer la idea de crear tejido cultural en Ourense y del rol que puede tener La Región en ese cometido.
