Fernando Osuna, el abogado de las tres hermanas de Meis (Pontevedra) que presentaron una demanda de filiación para probar que son nietas de José Benito Torres Bouzas, a quien se le atribuye haber dejado una importante herencia y que falleció sin dejar descendencia oficial, consideró ayer que el plazo para efectuar esta reclamación "no es perecedero", frente a la opinión sostenida en la primera vista de este caso por el Ministerio Fiscal, que defiende que ya ha caducado.
Las demandantes, Amparo, Dolores y Ana Domínguez, reclamaron que se reconozca su condición de nietas de Torres Bouzas, vecino de Meis que emigró a Argentina, donde falleció en 1954, puesto que su padre, Nemesio Domínguez, también fallecido, era un hijo no reconocido del emigrado, de quien se cree que deja una herencia "considerable", conformada por más de 60 propiedades en la comarca de O Salnés, tanto parcelas rústicas como fincas urbanas, apuntó Osuna.
Después de que el fiscal alegase en la primera vista, que tuvo lugar el martes, que el tiempo para presentar una demanda de filiación había prescrito, Osuna reconoció ayer que habían "analizado" esta posibilidad, pero matizó que existen "lagunas" en el Código Civil sobre los plazos y el "tipo de reclamación" que ha de efectuarse cuando quienes reclaman la filiación son los nietos. Para lograr este reconocimiento, las demandantes solicitaron una prueba de ADN.
Después de que el fiscal alegase en la primera vista, que tuvo lugar el martes, que el tiempo para presentar una demanda de filiación había prescrito, Osuna reconoció ayer que habían "analizado" esta posibilidad, pero matizó que existen "lagunas" en el Código Civil sobre los plazos y el "tipo de reclamación" que ha de efectuarse cuando quienes reclaman la filiación son los nietos. Para lograr este reconocimiento, las demandantes solicitaron una prueba de ADN.
