Un menor de 15 años, acompañado de su padre, se presentó en la mañana de ayer en la Comisaría de la Policía Nacional como presunto autor de la muerte el pasado miércoles de una vecina de la parroquia de O Viso, en el municipio pontevedrés de Redondela, y de causar heridas al marido. Las declaraciones del joven corroboraron las que había realizado el lesionado una vez que recibió el alta en el centro sanitario. Los encargados del caso dan por cerrada la investigación, por lo que se descarta que el menor hubiera actuado en compañía de otras personas.
El adolescente, cuya identidad no ha trascendido, vivía en la parroquia de Cesantes, no muy lejos del lugar en el que se produjo el trágico suceso que ayer todavía mantenía en vilo a los vecinos de toda la zona. El detenido fue trasladado ayer a última hora de la tarde a las dependencias de la Fiscalía de Menores, en la ciudad de Pontevedra, tras inhibirse la juez encargada del caso por tratarse de un menor con 15 años.
Toda la investigación se está llevando a cabo con gran hermetismo como consecuencia de la edad del único detenido, del que este periódico pudo saber que estaba pasando una época inestable a nivel psicológico. El padre del joven fue quien le acompañó hasta las dependencias policiales para entregarse. El progenitor informó a los agentes que había tenido conocimiento de las investigaciones que se estaban llevando cabo en relación a la muerte de una septuagenaria y que creía que su hijo era el responsable de la agresión con arma blanca.
Todo parece indicar que el menor supuestamente habría atacado primero a la mujer y que, al escuchar los gritos de ayuda, el marido se habría enfrenado al agresor, que le produjo varios cortes, aunque ninguno de gravedad. El móvil del sucesos no ha trascendido por el momento.
La agresión se produjo poco antes del mediodía. A esa hora un vecino que vive a escasos metros de la casa de las víctimas escuchó al hombre que llamaba a su yerno. 'Le llamó hizo tres veces y después fue cuando salió en su coche hacia Redondela'. Antes de escucharle, Benito asegura que no se escuchó nada. 'Todo estaba tranquilo, ni siquiera ladró el perro que tenían, uno grande que ladraba a todo el mundo'.
Toda la investigación se está llevando a cabo con gran hermetismo como consecuencia de la edad del único detenido, del que este periódico pudo saber que estaba pasando una época inestable a nivel psicológico. El padre del joven fue quien le acompañó hasta las dependencias policiales para entregarse. El progenitor informó a los agentes que había tenido conocimiento de las investigaciones que se estaban llevando cabo en relación a la muerte de una septuagenaria y que creía que su hijo era el responsable de la agresión con arma blanca.
Todo parece indicar que el menor supuestamente habría atacado primero a la mujer y que, al escuchar los gritos de ayuda, el marido se habría enfrenado al agresor, que le produjo varios cortes, aunque ninguno de gravedad. El móvil del sucesos no ha trascendido por el momento.
La agresión se produjo poco antes del mediodía. A esa hora un vecino que vive a escasos metros de la casa de las víctimas escuchó al hombre que llamaba a su yerno. 'Le llamó hizo tres veces y después fue cuando salió en su coche hacia Redondela'. Antes de escucharle, Benito asegura que no se escuchó nada. 'Todo estaba tranquilo, ni siquiera ladró el perro que tenían, uno grande que ladraba a todo el mundo'.
