A punto de que el próximo viernes comience una novena legislatura en la Cámara gallega, las cuatro fuerzas políticas que han conseguido representación parlamentaria perfilan sus estrategias. Por el momento y antes de que empiece a cuestionarse la gestión del futuro Gobierno de Feijóo, sobre el tapete está la composición de la mesa del Parlamento. En la reunión que ayer mantuvo el Grupo Parlamentario del PP el presidente en funciones trasladó a sus compañeros en el hemiciclo el aviso de que se aventura 'una legislatura dura' a pesar de tener la mayoría absoluta con 41 parlamentarios.
Según ha podido saber este periódico, Alberto Núñez Feijóo también les trasladó a sus compañeros su preocupación por la irrupción en el hemiciclo por la irrupción de Xosé Manuel Beiras Torrado, ya que puede arrastrar a las demás fuerzas progresistas a endurecer su discurso.
Pero dejando a un lado los develos del presidente y futuro titular de la Xunta que también tiene que afrontar la trascendente tarea de conformar un equipo de Gobierno, las preguntas a los diputados del PP sobre la asunción de responsabilidades y del compromiso a que un diputado tenga la obligación de dimitir en el caso de que sea procesado, como sucedió con Javier Escribano o Pablo Cobián y suspendido cautelarmente de militancia, el debate serio gira sobre la composición de los órganos que decidirán la tarea parlamentaria.
REPARTO DE LA MESA
No es un asunto menor. Por deferencia parlamentaria, el PSdeG permitió que en las pasadas legislaturas se sentase en la Mesa del Parlamento un miembro del BNG. Por el último resultado electoral, al PP le correspondería la presidencia, la vicepresidencia primera y la secretaría, siendo para los socialistas gallegos la vicepresidencia segunda y la vicesecretaría. La Mesa del Parlamento es la que fija el orden del día en el Pleno y las comisiones, entre otros cometidos.
Si ninguna de las dos fuerzas políticas mayoritarias tiene un gestos de cortesía democrática, tanto AGE, con nueve diputados como el BNG, con siete, se quedarían fuera de la mesa. Por eso, ayer el BNG envió una misiva al resto de fuerzas políticas para ocupar con AGE de manera rotatoria un puesto en la mesa, según confirmó Francisco Jorquera, que ejercerá de portavoz parlamentario.
Para el BNG no se trata de una pataleta, sino de 'respeto al pluralismo, ya que el nacionalismo cuenta con 'dos referentes y once diputados', siete del BNG y cuatro de Anova. La fuerza de Beiras ya avisó de que los dos partidos mayoritarios no den su brazo a torcer. No es probable que el PP ceda para perder su mayoría en la Mesa del Parlamento. El PSdeG, que tiene una reunión mañana, lo estudiará si cede un puesto en la Mesa del Parlamento en la Ejecutiva del jueves.
Pero dejando a un lado los develos del presidente y futuro titular de la Xunta que también tiene que afrontar la trascendente tarea de conformar un equipo de Gobierno, las preguntas a los diputados del PP sobre la asunción de responsabilidades y del compromiso a que un diputado tenga la obligación de dimitir en el caso de que sea procesado, como sucedió con Javier Escribano o Pablo Cobián y suspendido cautelarmente de militancia, el debate serio gira sobre la composición de los órganos que decidirán la tarea parlamentaria.
REPARTO DE LA MESA
No es un asunto menor. Por deferencia parlamentaria, el PSdeG permitió que en las pasadas legislaturas se sentase en la Mesa del Parlamento un miembro del BNG. Por el último resultado electoral, al PP le correspondería la presidencia, la vicepresidencia primera y la secretaría, siendo para los socialistas gallegos la vicepresidencia segunda y la vicesecretaría. La Mesa del Parlamento es la que fija el orden del día en el Pleno y las comisiones, entre otros cometidos.
Si ninguna de las dos fuerzas políticas mayoritarias tiene un gestos de cortesía democrática, tanto AGE, con nueve diputados como el BNG, con siete, se quedarían fuera de la mesa. Por eso, ayer el BNG envió una misiva al resto de fuerzas políticas para ocupar con AGE de manera rotatoria un puesto en la mesa, según confirmó Francisco Jorquera, que ejercerá de portavoz parlamentario.
Para el BNG no se trata de una pataleta, sino de 'respeto al pluralismo, ya que el nacionalismo cuenta con 'dos referentes y once diputados', siete del BNG y cuatro de Anova. La fuerza de Beiras ya avisó de que los dos partidos mayoritarios no den su brazo a torcer. No es probable que el PP ceda para perder su mayoría en la Mesa del Parlamento. El PSdeG, que tiene una reunión mañana, lo estudiará si cede un puesto en la Mesa del Parlamento en la Ejecutiva del jueves.
