El rector de la Universidade da Coruña (UDC), Xosé Luís Armesto, cree que 'sin una mayor financiación, es ingenuo pensar que se puede mejorar la calidad del sistema universitario gallego'.
Mientras, apela al 'diálogo' para que el Gobierno modifique su política educativa que vincula con un 'planteamiento ideológico regresivo'. En una entrevista, advierte de que a la UDC se le está 'acabando el margen de maniobra' para afrontar la disminución de recursos. 'Sin financiación, es difícil tener universidades que lideren a nivel mundial', insiste el rector, quien alerta también del 'ataque' a la autonomía universitaria.
'Se empieza por la financiera y se acaba en la organizativa', apunta sobre algunas leyes aprobadas por el Gobierno y la Xunta como la Ley de Universidades gallega, de la que asegura que 'poco aporta, era innecesaria'.
En este contexto, el rector de la UDC ve 'razonable' la convocatoria de protestas este curso como las anunciadas ya por los estudiantes por la política de becas o las tasas. 'Es injusto y, si es injusto, es razonable que las haya', recalca.
Convencido de que la opinión que la ciudadanía tiene de los servicios públicos debe traducirse en que 'exijan a los gobernantes que cambien sus políticas', rechaza los nuevos criterios de becas 'porque el principio de igualdad de oportunidades tiene que estar basado en la falta de recursos económicos'. 'No tiene que ser más listo el becario que el estudiante medio', apunta. Por otra parte, subraya que, para los 400 estudiantes que el curso pasado en la UDC no superaron el 50% de los créditos en los que estaban matriculados, eso supondrá 'tener que devolver la beca que cobraron'.
'Se empieza por la financiera y se acaba en la organizativa', apunta sobre algunas leyes aprobadas por el Gobierno y la Xunta como la Ley de Universidades gallega, de la que asegura que 'poco aporta, era innecesaria'.
En este contexto, el rector de la UDC ve 'razonable' la convocatoria de protestas este curso como las anunciadas ya por los estudiantes por la política de becas o las tasas. 'Es injusto y, si es injusto, es razonable que las haya', recalca.
Convencido de que la opinión que la ciudadanía tiene de los servicios públicos debe traducirse en que 'exijan a los gobernantes que cambien sus políticas', rechaza los nuevos criterios de becas 'porque el principio de igualdad de oportunidades tiene que estar basado en la falta de recursos económicos'. 'No tiene que ser más listo el becario que el estudiante medio', apunta. Por otra parte, subraya que, para los 400 estudiantes que el curso pasado en la UDC no superaron el 50% de los créditos en los que estaban matriculados, eso supondrá 'tener que devolver la beca que cobraron'.
