Un grupo de aproximadamente un centenar de afectados por las participaciones preferentes y deuda subordinada de Novagalicia Banco se han manifestado esta tarde por las calles de Vigo cantando villancicos reivindicativos en los que el blanco de sus críticas han sido los banqueros y la clase política.
A pesar de la lluvia y del fuerte viento, con rachas que llegaron a romper más de un paraguas, la comitiva 'navideña' cumplió con el guión preestablecido y recorrió la zona centro de Vigo, incluida la comercial calle Príncipe, el Casco Vello y A Laxe para regresar por las Avenidas.
Las manifestantes, ataviados con gorros de Papá Noel, han interpretado villancicos versionados, con mención destacada para la 'Marimorena' con un estribillo que rezaba: 'Vaya Navidades que tenemos por delante, con las preferentes y tanto mangante'.
Aparte de dedicar varios epítetos como 'sabandijas' e 'hienas' a los responsables de Caixa Galicia y Caixanova, cuyos 'cantos de sirena' se creyeron a la hora de adquirir productos híbridos, las letras de los villancicos contenían varios mensajes.
Uno de ellos, que 'los gobernantes' obliguen a la entidad gallega a 'devolver su timo' y no permitan a sus directivos 'irse de rositas' mientras que a ellos les imponen 'una cuantiosa quita'.
También ha habido alusiones al 'arreglo del arbitraje' y al hecho de que, 'pasadas las elecciones', los afectados por las preferentes se han vuelto a ver 'en la calle'.
Antes de iniciar el recorrido, los manifestantes, la mayoría de avanzada edad, calentaron voces en la sede central de Novagalicia, punto de partida y final del acto reivindicativo de hoy y de los que habitualmente convoca la plataforma de afectados de Vigo-Val Miñor.
Ha ejercido como director de orquesta un particular Papá Noel que, megáfono en mano, ha llevado la batuta en los cánticos, aunque durante el recorrido callejero han sonado las clásicas consignas como el 'No nos moverán' o 'Ni un paso atrás', aderezadas con una fuerte pitada.
Mientras que afectados por las preferentes de otras zonas de la provincia de Pontevedra han optado por medidas más drásticas como iniciar encierros en cajeros (Gondomar), acampadas ante sucursales (Cangas y Moaña) y en la casa del pueblo (O Rosal), los de Vigo han recurrido a la retranca para escenificar su enfado.
No es la primera vez que lo hacen, ya que en la víspera del día de Todos los Santos celebraron una particular fiesta de Halloween con una procesión de almas en pena, vestidos de muertos, enterradores y fantasmas, y con queimada y 'conxuro' incluidos.
Las manifestantes, ataviados con gorros de Papá Noel, han interpretado villancicos versionados, con mención destacada para la 'Marimorena' con un estribillo que rezaba: 'Vaya Navidades que tenemos por delante, con las preferentes y tanto mangante'.
Aparte de dedicar varios epítetos como 'sabandijas' e 'hienas' a los responsables de Caixa Galicia y Caixanova, cuyos 'cantos de sirena' se creyeron a la hora de adquirir productos híbridos, las letras de los villancicos contenían varios mensajes.
Uno de ellos, que 'los gobernantes' obliguen a la entidad gallega a 'devolver su timo' y no permitan a sus directivos 'irse de rositas' mientras que a ellos les imponen 'una cuantiosa quita'.
También ha habido alusiones al 'arreglo del arbitraje' y al hecho de que, 'pasadas las elecciones', los afectados por las preferentes se han vuelto a ver 'en la calle'.
Antes de iniciar el recorrido, los manifestantes, la mayoría de avanzada edad, calentaron voces en la sede central de Novagalicia, punto de partida y final del acto reivindicativo de hoy y de los que habitualmente convoca la plataforma de afectados de Vigo-Val Miñor.
Ha ejercido como director de orquesta un particular Papá Noel que, megáfono en mano, ha llevado la batuta en los cánticos, aunque durante el recorrido callejero han sonado las clásicas consignas como el 'No nos moverán' o 'Ni un paso atrás', aderezadas con una fuerte pitada.
Mientras que afectados por las preferentes de otras zonas de la provincia de Pontevedra han optado por medidas más drásticas como iniciar encierros en cajeros (Gondomar), acampadas ante sucursales (Cangas y Moaña) y en la casa del pueblo (O Rosal), los de Vigo han recurrido a la retranca para escenificar su enfado.
No es la primera vez que lo hacen, ya que en la víspera del día de Todos los Santos celebraron una particular fiesta de Halloween con una procesión de almas en pena, vestidos de muertos, enterradores y fantasmas, y con queimada y 'conxuro' incluidos.
