El alicantino dejó atrás una mala racha de resultados imponiéndose en la última especial al gallego Iván Ares
Miguel Fuster (Ford Fiesta R5) rompió su racha de malos resultados con un ajustado triunfo en el Rally Villa de Llanes, que pronto se quedó cojo en la lucha por la victoria con el abandono por problemas mecánicos de José Antonio 'Cohete' Suárez.
El alicantino Fuster tuvo como gran rival al vigente campeón y ahora más líder del certamen, Iván Ares, que copilotado por José Pintor atacó en la última especial pero no obtuvo el premio de la victoria final, quedándose a tan solo tres segundos del vencedor.
El tercer escalón del podio, en una prueba en la que rodó en tierra de nadie, fue para el cántabro Surhayén Pernía, con el conocido Carlos del Barrio en el bacquet de la derecha, a más de de dos minutos de la cabeza.
Joan Vinyes en uno de los Suzuki Swift N5 fue el cuarto clasificado de la prueba, con el alaricano Javier Pardo justo a continuación, después de sufrir distintos percances mecánicos durante la prueba (tanto por la mañana como por la tarde, temiéndose incluso que pudiese llegar a la meta de Llanes) que lastraron sus prestaciones a los mandos del vehículo japonés.
Pardo, acompañado del asturiano Adrián Pérez sigue con su excelente temporada de debut con un vehículo de cuatro ruedas motrices y sumó unos importantes puntos para el campeonato de marcas, escoltando a su teórico jefe de filas, el andorrano Vinyes.
El cántabro Dani Martínez, en un Citroën Ds3 R3T fue el sexto clasificado y primer dos ruedas motrices de la cita asturiana, en la que el vencedor de la Copa Suzuki Swift, único formato promocional presente, fue el también astur Fredy Tamés, que dominó a su antojo los tramos del Principado.
En la Copa N5 de RMC, el vencedor fue José Luis García, que aprovechó la salida de carretera de Efrén Llarena, que finalmente fue segundo.
El nacional de asfalto continuará en octubre con la disputa del Rally de Santander.
