Las Brigadas de Refuerzo en Incendios Forestales de Laza (BRIF) sofocó en las dos últimas semanas del pasado mes de julio fuegos que se declararon en montes de Tarragona, Avila y Teruel. En total son 51 operarios que durante los meses de septiembre y agosto centran su trabajo en la provincia ourensana.
Desde los montes que rodean Laza no se veía a las 12.00 horas de la jornada ninguna columna de humo procedente de un incendio forestal. Tampoco se avistaban más allá del municipio. Sin embargo, los 51 operarios de las Brigadas de Refuerzo en Incendios Forestales (BRIF) estaban en alerta, ya equipados para combatir el fuego.
Sobre el mediodía, los operarios recibían la visita de la ministra de Medio Ambiente, Rural y Marino, Elena Espinosa, que durante más de hora y media se interesó por el funcionamiento de las instalaciones. Durante el recorrido, en el que estuvo acompañada por el dele gado del Gobierno en Galicia, Antón Louro, y el parlamenteario Alberto Fidalgo, entre otras autoridades, el director de la base, Moncho Barreal, explicó a la ministra que en las últimas dos semanas del mes de julio participaron en trabajos de extinción de incendios en Tarragona, Ávila y Teruel. Los operarios pueden ser llamados a sofocar incendios en cualquier punto del territorio, pero durante agosto y septiembre están centrados en los fuegos de la provincia.
Los 51 efectivos de extinción se turnan en tres grupos, lo que permite que la base esté continuamente operativa. Están apoyados por dos helicópteros, en los que suelen desplazarse y trasportar más de 1.500 litros de agua en cada aparato. En invierno, los trabajadores se dedican a la prevención de fuegos, desbrozando maleza. Los fuegos del verano se pueden apagar en invierno, aseguró Espinosa, refiriéndose a que hay que limpiar el monte antes del verano.
Sobre el mediodía, los operarios recibían la visita de la ministra de Medio Ambiente, Rural y Marino, Elena Espinosa, que durante más de hora y media se interesó por el funcionamiento de las instalaciones. Durante el recorrido, en el que estuvo acompañada por el dele gado del Gobierno en Galicia, Antón Louro, y el parlamenteario Alberto Fidalgo, entre otras autoridades, el director de la base, Moncho Barreal, explicó a la ministra que en las últimas dos semanas del mes de julio participaron en trabajos de extinción de incendios en Tarragona, Ávila y Teruel. Los operarios pueden ser llamados a sofocar incendios en cualquier punto del territorio, pero durante agosto y septiembre están centrados en los fuegos de la provincia.
Los 51 efectivos de extinción se turnan en tres grupos, lo que permite que la base esté continuamente operativa. Están apoyados por dos helicópteros, en los que suelen desplazarse y trasportar más de 1.500 litros de agua en cada aparato. En invierno, los trabajadores se dedican a la prevención de fuegos, desbrozando maleza. Los fuegos del verano se pueden apagar en invierno, aseguró Espinosa, refiriéndose a que hay que limpiar el monte antes del verano.
