El jueves presidirá el pleno municipal como regidor en funciones, tras el fallecimiento de su padre
El Concello de A Gudiña intentaba ayer recuperar la actividad que la repentina desaparición de su alcalde quebró el pasado jueves. Sus funcionarios, todavía afectados por la luctuosa marcha del que fue su regidor, se afanaban en darle normalidad al funcionamiento de la institución con las modificaciones administrativas que la muerte de Guillermo Lago obliga, como los cambios de autorizaciones de firma en bancos.
Asimismo, ayer se hacía pública la convocatoria de un pleno extraordinario para el próximo jueves, la Corporación aprobará dar cuenta a la junta electoral central del fallecimiento de su cabeza de lista y solicitará la certificación del acta de concejal del siguiente en la lista popular que se incorporará a la Corporación y que se corresponde con Eduardo Villarino Nieves.
El alcalde en funciones, José María Lago Cabo, confirmaba ayer que, "como no podía ser de otra forma, porque así la ley me lo exige, he asumido las competencias de la alcaldía como alcalde en funciones hasta que la Corporación no elija nuevo regidor".
Tras la solicitud a la junta electoral, habrá que aguardar a la llegada de la certificación para que el nuevo edil pueda tomar posesión y en el transcurso de ese mismo pleno se podría proceder a la elección del nuevo mandatario.
José María Lago declinó pronunciarse sobre si optará al cargo: "Creo que si no se tratase de mi padre, también por respeto a la memoria del anterior alcalde, tardaría un tiempo en adoptar esa decisión. Imagínese cuando se trata de que además es tu padre", aseguró
