Es el tercer edil de los grupos de la oposición que abandona la Corporación municipal en un año

El portavoz del BNG de Verín renuncia a su acta de concejal debido a razones personales

Eloy Domínguez y Perfecta Losada (de frente), ediles del BNG, en un pleno de Verín. (Foto: Xesús Fariñas.)
La Corporación municipal de Verín entra en una espiral de desencanto político, reflejado en el abandono de la actividad municipal por concejales de la oposición. El portavoz del BNG, Eloy Domínguez, presentó ayer su renuncia aludiendo motivos personales, después de siete años ejerciendo. En 2008, también el número dos de la lista nacionalista, Abelardo Rúa, y en septiembre de este año dimitió el edil socialista Juan Carlos Francisco Rivera. El gobierno de Jiménez gana estabilidad y elimina ‘adversarios’.
El grupo de gobierno del PP de Verín se va quedando sin adversarios políticos en el seno de la Corporación, que entra en una espiral de desencanto político tal y como refleja la renuncia de varios ediles de la oposición. El número uno de la lista del BNG (tiene dos ediles), Eloy Domínguez, dimitió ayer aludiendo motivos personales, después de siete años ejerciendo como concejal. Afirma que es una decisión tomada hace meses: ‘Teño a miña ocupación laboral, son profesor, e unha familia. Necesítase moito tempo para adicar ó Concello que non teño. Sinceramente, xa non me quedan ganas de seguir na vida política’.

Reconoce que puede tener sus discrepancias con el BNG, partido en el que seguirá militando, pero ‘esta non é a causa principal da miña partida. Hai xente nova que poder coller as riendas no Concello’. Además, brinda ánimo a los grupos de la oposición pues cree que tienen motivos suficientes para apretar las tuercas al grupo de gobierno ya que ‘Verín leva máis de tres anos sin plan urbanístico, entre outras cousas’.

Como aportación del BNG a los ciudadanos de Verín, cita la gestiones para que la titularidad del castillo pasase a manos de la Xunta y la construcción del parque empresarial de Tamagos.

Hace un año dimitió su compañero y número uno de la lista nacionalista, Abelardo Rúa, y en septiembre lo hizo el socialista Juan Carlos Francisco Rivera, ambos también argumentando motivos personales. Además, el independiente Alberto Prieto dejó en segundo plano su vida política por razones laborales en Madrid y, actualmente, comienza a faltar a los plenos.

Un gobierno local sin presión y relajado

Los grupos de la oposición de Verín van perdiendo concejales y, al mismo tiempo, en los últimos meses apenas se dejan sentir a la hora de fiscalizar la labor de gobierno. Esta circunstancia favorece la estabilidad y tranquilidad del grupo de gobierno ‘popular’ que lidera con mayoría absoluta Juan Manuel Jiménez Morán.

La Corporación está formada por nueve concejales del PP, cuato del PSOE, dos del BNG y dos independientes. Ciudadanos consultados consideran que la pérdida de las elecciones en la Xunta por parte del bipartito marcó un antes y después en las Corporaciones locales pues en la propia comarca de Verín han dimitido ediles nacionalistas, como en el caso del Concello de Monterrei, y socialistas, como ocurrió en Laza. Otros afirman que el alcalde de Verín gobierna a sus anchas porque tiene ‘domesticada’ a la oposición, un comentario que el regidor rechaza tajantemente. ‘Respeto muchísimo las decisiones personales de los concejales. Eloy Domínguez me entregó una carta personal de despedida. Lamento que abandone la vida política municipal’, señala Jiménez. Además, considera que el hecho de que abandonen algunos ediles de la oposición ‘no nos favorece ni nos deja de favorecer. Nosotros estamos haciendo una buena gestión, que es lo importante’. En este sentido, pone como ejemplo que el Concello ha obtenido fondos para inversiones que permitirán construir el parque empresarial de Tamagos y ampliar el de Pazos además de construir un auditorio, entre otras infraestructuras.

Para el portavoz del grupo municipal socialista, Emilio González Afonso, la marcha de concejales antes de finalizar el mandato tiene doble lectura pues, ‘por un lado, supón a perda de concelleiros con experiencia, veteranos, e por outro revela que os novos que chegan tamén poden facer a súa labor perfectamente. O único é que mentres se poñen ó día se perde sempre un pouco de comba’. Afonso cree que los cambios a medio camino de la legislatura no son buenos y que lleva a la relajación del grupo de gobierno.


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