El Parlamento de Galicia volvió a ser epicentro este martes de la polémica por el cierre del paritorio del hospital de Verín, en una jornada en que el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, volvió a insistir en que se puede reabrir, si las vecinas "non teñen inconveniente" y siempre bajo una premisa básica: "Atopar máis pediatras". Y todo ello con cerca de 500 personas (1.000, según los manifestantes) llegadas desde la comarca de Monterrei y concentradasfrente al Pazo do Hórreo, en un día que se cerró en Verín realizando los trámites para trasladar –con normalidad, según fuentes del hospital– a una embarazada al CHUO para dar a luz.
Feijóo insistió, antes del pleno, en que si se logra contratar pediatras se reactivará la unidad de partos en Verín. "Todos os que queren o paritorio quéreno completo con xinecólogos e matronas, que xa hai, pero tamén con pediatras, que hai que contratar. Se os veciños queren usar o paritorio desde o punto de vista das súas decisións persoais , nós non temos inconveniente en que o fagan baixo a súa responsabilidad", dijo Feijóo, antes de insistir en que el único "interese" del gobierno de la Xunta es "garantir a vida" en Verín.
Ya en pleno debate parlamentario, desde el PP, su portavoz, Pedro Puy, afeó a la oposición su "populismo" con el cierre del paritorio, recordando que ni PSOE ni Grupo Mixto enmendaron "nada" en los Orzamentos. Desde la oposición replicaron que el tiempo para presentar enmiendas se había agotado antes de conocer "esta barbaridade".
Desde el PSOE, la diputada Begoña Rodríguez aludió al caso de Verín como una muestra del "desmantelamento" y la "precarización dos servizos públicos en favor dos servizos privados".
La portavoz del BNG, Ana Pontón, pidió a los populares que "escoiten o que están demandando los vecinos de Verín, ya que "non tragan coas súas mentiras", y que "recoñezan o seu erro e rectifiquen", reabriendo "xa" el paritorio. Además, anunció que Pontón pedirán una investigación sobre el último parto atendido en ese hospital. El portavoz de Grupo Mixto, Luís Villares, señaló que lo sucedido en Verín es un acto de "violencia institucional" contra las mujeres. Mientras, Manuel Lago (Común da Esquerda) intervino con una pegatina en el pecho donde se leía "Verín non se pecha".
Por último, fuera del Parlamento, representantes de Cs se compromete a que "su primera decisión" si llegan a la Xunta será reabrir el paritorio.
Vecinos de Verín protestan ante el Parlamento
Decenas de vecinos de la comarca de Monterrei se concentraron este martes frente al Parlamento, bajo el lema "Verín non se pecha". Nueve autobuses partieron del centro de Verín en dirección Santiago a primera hora de la mañana. La organización se quedó sin plazas suficientes para ofrecer a todas aquellas personas que querían participar en la movilización, tal y como aseguró la portavoz de la comisión delegada, Eva Fernández. La comitiva llegó a Santiago poco antes del mediodía y a ella se unieron otras personas de la capital gallega, así como manifestantes llegados de otros puntos de la comunidad como Vilagarcía. Según los convocantes llegaron a congregarse más de 1.000 personas, que terminaron por cortar la carretera que transcurre delante del Parlamento de Galicia. Allí repitieron consignas como "Verín non se pecha" u "O meu meniño non nace no camiño".
Estuvieron acompañados de políticos de la oposición, como Noa Presas, del BNG, que recordó que "se o PP pensa que as mulleres imos calar, van dados". También estuvieron con ellos los líderes de PSOE, BNG, En Marea, En Común de Esquerdas o Ciudadanos.
