El uso que se le dará en un futuro al castillo de Monterrei continúa en el aire.
El alcalde de Monterrei, José Luis Suárez Conde, se reunión ayer por espacio de más de dos horas con la secretaria xeral de Turismo, Nava Castro, para recabar información sobre el proyecto después de la numerosas quejas registradas en el Concello ante la sospecha de que podría convertirse en un hotel de lujo gestionado por una empresa privada.
Suárez Conde puso este asunto sobre la mesa durante la reunión pero no obtuvo respuestas. Lo despacharon con el argumento de que el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, se desplazará en un corto espacio de tiempo a la comarca de Monterrei "é será o encargado de dar a conocer todo o proxecto de rehabilitación e eu pouco máis podo decir", apuntó el regidor.
A preguntas de este periódico, Suárez Conde, dejó claro que de momento se está realizando una rehabilitación "e unha vez concluida falaremos dos usos que se lle van a dar ó castelo e o de convertirlo en un hotel tampouco está descartado de todo, pero eso xa se verá despois", afirmó.
El regidor se mostró inicialmente en contra del negocio hotelero al entender que el actual Parador Nacional de Turismo está situado a unos 200 metros y en la actualidad no funciona -estuvo amenazado de cierre- ante la falta de clientela.
Suárez Conde sostenía ayer la misma postura, añadiendo que primero hay que esperar a que finalicen los trabajos y al proyecto que presenten la Xunta de Galicia para poner en funcionamiento de forma integral toda la fortaleza.
Referente a los trabajos que se están realizando en la actualidad- el castillo está cubierto de andamios de hierro-, Suárez Conde, entiende que están siendo ejecutados ciñiéndose al proyecto que presentó la Secretaría Xeral de Turismo en el Concello, sin ocasionar ningún daño al conjunto histórico medieval. "Están rehabilitando madeiras, paredes e construindo espacios axardinados", añadió el regidor. El proyecto también contempla la renovación de las conexiones eléctricas, la instalación de un ascensor y la reforma de la antigua casa rectoral, así como los accesos.
Los trabajos fueron fiscalizados por el arquitecto y aparejador del Concello de Monterrei en la tarde del lunes, después de varios intentos -la empresa constructora no les autorizó el acceso al recinto- y ambos técnicos dieron el visto bueno a todo lo realizado.
